El hombre al que Campo dejó en libertad provisional «tocó y besó los genitales de su hijo”
El hombre al que el ministro Juan Carlos Campo dejó en libertad provisional, "besó los genitales y las nalgas" de su hijo de 3 años a través de distintos juegos como 'el delfín'.
El hombre al que el ministro Juan Carlos Campo dejó en libertad provisional «besó los genitales y las nalgas» de su hijo de 3 años a través de «distintos juegos que utilizaba como el denominado ‘delfín’ cuando lo bañaba», según la sentencia condenatoria dictada por la Audiencia Provincial de Cádiz a la que ha tenido acceso OKDIARIO.
En el apartado de ‘hechos probados’ el tribunal expone que durante diez meses, aprovechando los períodos de visita con el pequeño y cuando se encontraban en el domicilio, «con ánimo libidinoso» y «a través de distintos juegos que, utilizaba, como el denominado ‘delfín’ cuando lo bañaba, o aprovechando situaciones en las que el menor se encontraba adormilado en el dormitorio, e incluso en el salón, llevó a cabo tocamientos con su hijo menor».
El padre realizaba «tocamientos en los genitales y zona anal del menor por debajo de la ropa, llegando a besarle en distintas partes del cuerpo, incluidos los genitales y las nalgas, haciendo que el menor le tocara sus genitales por debajo de la ropa, llegando a tener que realizarle masturbaciones».
Dos años de cárcel
El condenado reconoció los hechos en el juicio y fue condenado a la pena de dos años de cárcel, la prohibición de aproximarse al menor y a la madre en un radio de 200 metros y de comunicarse con ellos durante diez años y el pago de 5.000 euros de indemnización por daños morales.
OKDIARIO se ha puesto en contacto con el bufete que ejerció la representación legal de la acusación particular, ejercida por la madre del menor, quien ha explicado que «se llegó a un acuerdo con la Fiscalía y el acusado con el fin de terminar el proceso penal cuanto antes».
La causa se inició en 2007, pero el acusado no fue juzgado hasta ocho años después, en 2015. La defensa de la víctima ha manifestado que este retraso se debe a la estrategia utilizada por la defensa del condenado de «recurrir cualquier medida para dilatar el procedimiento». Esto ayudó además a que la pena fuese menor a la que debería corresponderle.
Recuerdo del menor
La sentencia destaca la existencia de «informes periciales» en los que los psicólogos determinaron ya la «alta probabilidad» de que el menor hubiese sufrido abusos. Los expertos destacaban, según se recoge, que «las manifestaciones del recuerdo del menor sobre los supuestos abusos sexuales sufridos parecen ser una representación adecuada de la realidad» y también que «en el transcurso de la exploración» el pequeño manifestó «de forma espontánea que los presuntos hechos se pudieron cometer por parte de su padre biológico».
El hombre vive actualmente en una comunidad autónoma distinta a la del menor y no ha intentado ponerse en contacto con la víctima. La familia intenta olvidar estos hechos y desea continuar en el anonimato, según ha manifestado la defensa.