La gota que colmó el vaso fue el multazo de 269.500€ que le metió Montoro y que desveló OKDIARIO
José María Aznar comunicó este martes que abandona la presidencia de honor del Partido Popular, decisión que llevaba meditando largos meses y motivada por lo que él considera una deriva equivocada con Mariano Rajoy al frente y por disputas con distintos miembros de su equipo.
Pero sin duda hay un hecho que definitivamente agotó su paciencia y es la multa de 269.500 euros que le metió Cristóbal Montoro por utilizar una sociedad instrumental para ahorrarse el pago de la mitad de los impuestos y de la que informó puntualmente y con todo detalle OKDIARIO el pasado abril.
La Agencia Tributaria, a raíz de una investigación, decidió sancionarle con 70.403,96 euros y a abonar una liquidación complementaria de 199.052,19 por diversas irregularidades fiscales cometidas en los ejercicios 2011 y 2012.
Como dio cuenta este medio, el episodio -que truncó sin retorno la ya de por sí débil relación entre Génova y el ex mandatario- contó además con una sonada discusión en el despacho del ministro. «¡No me puedo creer que los míos me hagan algo así!», se quejó el afectado, a lo que el titular de Hacienda respondió: «¡Yo no me puedo creer que uno de los nuestros haya hecho algo así!».
Cataluña y las subidas de impuestos
Con este como principal desencuentro, lo cierto es que en los últimos años la cuerda se ha ido tensando hasta el extremo de poder preverse esta resolución, a la que sólo faltaba poner fecha. La discrepancia ha continuado hasta el último minuto, con la estrategia de diálogo emprendida con la Generalitat como motivo fundamental. Entiende el político que no se puede negociar nada y menos ceder ante quien pretende romper España.
Hace una semana, FAES, la fundación que preside Aznar -también desligada del PP-, criticó en un artículo con más dureza de la habitual la senda del partido -«ha asumido el relato que hacen sus adversarios», se puede leer- y en particular a la número 2 del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, encargada de limar asperezas con el Ejecutivo catalán.
Otro factor que ha dinamitado la comunión son las subidas de impuestos -la última anunciada hace escasas semanas, sobre alcohol, tabaco y bebidas azucaradas-, a las que se oponen tradicionalmente otros dirigentes en activo como Esperanza Aguirre, una de las mayores valedoras de Aznar en el seno de la formación.
El laboratorio de ideas de Aznar no ha tenido apenas reflejo en el camino emprendido por Rajoy, a quien dio el relevo en 2003 y por quien a partir de ahora será un militante más de las siglas en las que lo ha sido todo.