El Defensor del Pueblo investiga la falta de transparencia de Pedro Sánchez en sus negociaciones con Torra
Los incumplimientos en materia de transparencia y la ocultación de información por parte del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en temas tan delicados como la negociación con Quim Torra de la Declaración de Pedralbes o incluso el uso del Super Puma han llegado al Defensor del Pueblo. La institución chequea en estos momentos los múltiples y continuos incumplimientos del ahora presidente en funciones y su Gobierno a la hora de dar información y cumplir con los requisitos que exige la Ley de Transparencia.
Los falta de transparencia del mandatario socialista ha sido incluida en una denuncia formulada ante el Defensor del Pueblo. Allí se recoge la reincidente conducta, prohibida por la Ley y sancionable, consistente en no responder a las peticiones de información formuladas directamente a Pedro Sánchez. La Ley de Transparencia obliga a resolver dichas peticiones de información y de manera motivada en caso de que sea denegatoria. El plazo concedido por ley es de un mes, prorrogable por otro más cuando la información requerida sea voluminosa o compleja. Según dispone el artículo 20.6 de la Ley 19/2013, “el incumplimiento reiterado de la obligación de resolver en plazo tendrá la consideración de infracción grave”.
Pues bien, lo cierto es que Sánchez no ha respondido a las peticiones de información por las que se le requerían cuestiones tales como la documentación de su contrato editorial, los gastos contabilizados de sus viajes en helicóptero, o el intercambio de documentos con Torra a raíz del llamado Pacto de Pedralbes, por citar algunos ejemplos.
Esta actitud ha merecido el reproche del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, tras recordar que la ausencia de tramitación de las solicitudes por parte de la Administración que dirige Sánchez es contraria a la Ley, por lo que aquella deberá “poner todos los medios materiales y humanos” (Resolución 754/2018,de 18 de marzo de 2019).
A Sánchez no parecen preocuparle demasiado las resoluciones del Consejo de Transparencia cuando le obligan a hacer entrega de documentación. De hecho las incumple de forma generalizada. Así ocurrió con los gastos de su mujer, Begoña Gómez, cuando en calidad de acompañante en un viaje presidencial, ella tuvo, sin embargo, agenda propia y se sirvió del uso de recursos públicos a tal fin. Sánchez alegó en ese momento que tal información es de carácter reservado, aplicando la Ley franquista de Secretos oficiales de 1968 y un acuerdo del Consejo de Ministros del 86.
Sin embargo, el Consejo de Transparencia tumbó esa argumentación al estimar que gastos tales como la manutención, el hospedaje, la seguridad y el vestuario no son materia de seguridad nacional y le instó para que hiciera entrega de tales gastos el pasado 5 de febrero. Pese a ello, Sánchez no ha hecho entrega de esos gastos.
Tras la polémica “vía de diálogo” con los separatistas catalanes abierta con el presidente de la Generalitat Quim Torra, Sánchez asistió a una reunión de la que nació el llamado “Pacto de Pedralbes”, con la propuesta que Torra entregó en mano al Presidente y que contenía la hoja de ruta del independentismo para acabar con el conflicto sostenido. Respecto de ese documento, Sánchez se negó no sólo a atender la petición de información que recibió, sino que una vez más, despreció al Consejo de Transparencia, que llegó a requerirle hasta en dos ocasiones, el 1 de marzo y el dos de abril de este año, para que formulara alegaciones.