La CUP presenta a un candidato para el Parlament para el que la Fiscalía pide la inhabilitación
La CUP ha lanzado su propuesta para presidir el Parlament durante la próxima legislatura. Se trata del diputado Pau Juvillà, para quien la Fiscalía de Lérida pide ocho meses de inhabilitación por no retirar los lazos amarillos de su despacho en el Ayuntamiento de Lérida durante la campaña para las elecciones autonómicas de 2017.
Según ha avanzado Nació Digital, los ‘cupaires’ han planteado el nombre de Juvillà en los órganos internos de la formación, que están acabando de debatir qué rol quieren tener en la Mesa de la nueva legislatura.
La CUP ya ha trasladado a Junts y ERC que está dispuesta a asumir la Presidencia del Parlament si sirve para garantizar que se pueda hablar de todo en el Parlament ante los posibles choques que se produzcan con el Tribunal Constitucional y para hacer frente a la presencia de Vox en el hemiciclo, cuentan.
Juvillà, que fue el cabeza de lista de la CUP por Lleida en las elecciones catalanas del 14 de febrero, está pendiente de un juicio por desobediencia por no haber descolgado durante campaña electoral lazos amarillos de su despacho en el Ayuntamiento de Lleida, lo que podría conllevar su inhabilitación.
En un tuit publicado en su cuenta personal, el mismo Juvillà ha defendido que, más allá de los nombres, la CUP apuesta por «convertir la Mesa en un muro antifascista y de defensa de la soberanía propia».
Mes enllà de noms el model. La @cupnacional aposta per convertir la mesa en un mur antifeixista i de defensa de la sobirania propia. https://t.co/GqsZ7rtuID
— Pau Juvillà (@pjuvilla) March 9, 2021
Este martes ERC, Junts y la CUP se han reunido por primera vez de manera conjunta para negociar la composición de la Mesa pero el encuentro ha concluido sin acuerdo.
Los tres partidos buscan un acuerdo antes del pleno de constitución del Parlament de este viernes, en el que se elegirá el presidente de la Cámara y el resto de miembros de la Mesa.
Si alcanzan un pacto podrían llegar a ocupar cinco de los siete puestos de la Mesa y la principal incógnita es qué partido se queda con la Presidencia del Parlament: la CUP está dispuesta a asumir este cargo, pero Junts considera que le corresponde a su formación este puesto porque hasta ahora siempre lo ha ostentado el segundo partido independentista más votado.