Cifuentes no pondrá fácil su salida: da orden a los suyos de resistir hasta que Rajoy lo ordene

Cristina Cifuentes no podrá fácil su salida del cargo de presidenta del PP de Madrid. Y ha dado orden a los suyos de resistir hasta que Rajoy lo ordene. Mariano Rajoy tuvo ya este miércoles que exigir la dimisión inmediata de la ya ex presidenta madrileña, que intentó aguantar en el cargo tras la publicación por OKDIARIO del vídeo en el que aparece ella robando un par de botes de crema en un hipermercado en el año 2011. Rajoy logró la dimisión: pero sólo de la Comunidad de Madrid. Por lo que Cifuentes aún conserva dos cargos: el de presidenta del PP de Madrid y el de diputada.

Muchas de las voces del PP se han vuelto contra Cristina Cifuentes y han exigido su salida de todos los cargos. No comparten la gestión de la crisis del máster que ha realizado, ni algunos de los actos de ataque contra gente del partido que ha efectuado en los últimos días, como el relativo a la Ciudad de la Justicia.

“Ella pide ahora comprensión. Pero no la tuvo con gente como Lucía Figar, ni con los equipos que mandaban la Comunidad en las obras de la Ciudad de la Justicia”, señala un compañero suyo de partido.

Muchas de las fuentes consultadas por este diario señalan que el “vídeo ha llegado en un mal momento para Cristina”. Y es que la semana pasada, “la Comunidad de Madrid denunció ante la Fiscalía General del Estado las múltiples irregularidades» cometidas en la gestión de la Ciudad de la Justicia. Se trataba de un proyecto de Esperanza Aguirre para agrupar en Valdebebas todos los organismos judiciales. Y un proyecto que ha acabado en polémica por el incumplimiento de forma «sistemática» de las»normas más esenciales» de contratación pública y contabilidad.

“Pero no era el momento de sacar pecho contra gente del partido que estuvo en aquella época en la Comunidad de Madrid”, explican.

Otros de los consultados recuerdan casos como el de Lucía Figar, que se vio forzada a tener que dimitir de su cargo mientras Cifuentes no dejaba de subir el listón de la exigencia política. Y esa exigencia, hoy, se le vuelve en contra.

No dejará el acta

Pero Cifuentes está dispuesta a aguantar en el partido y en posesión de su acta hasta que sea el propio Rajoy el que le diga que tiene que salir de esos puestos y abandonar su representación del PP.

No es una estrategia nueva para la ex presidenta de Madrid. De hecho, hizo ya lo mismo al inicio de la crisis por el máster de la Universidad Rey Juan Carlos, donde pidió que fuese el propio Mariano Rajoy el que le solicitase la dimisión del cargo de presidenta autonómica. Rajoy, en aquella ocasión, acabó aceptando mantenerla en el cargo y jugarse un órdago con Ciudadanos a ver quién llegaba más lejos en la moción de censura: Ciudadanos en su respaldo, y el PP en su omisión de cesión pese a los avisos del partido de Rivera.

En esa ocasión la estrategia le funcionó a Cifuentes. Pero ahora una buena parte de miembros del partido han señalado que “no hay dudas del comportamiento reprochable. Y además está en vídeo, con lo que el ataque público va a ser brutal”. Y han pedido que, pese a su deseo de mantenerse firme hasta el final, se dé paso cuanto antes a una renovación global del partido para evitar problemas mayores y poder prepararse para los retos electorales que ya se acercan.