Auxiliar a Cataluña con agua en barco por su falta de inversiones costará 160.000 € al día

Auxiliar a Cataluña para paliar la sequía que padece tendrá un coste a partir de junio de 160.000 euros diarios, que tendrá que afrontar en parte importante el Gobierno de España. Esta cantidad se fundamenta en la estimación realizada por el mayor experto en agua de la provincia de Alicante Joaquín Melgarejo. 

Melgarejo ha calculado en 2 euros el coste de producción y transporte de cada metro cúbico de agua desalada que salga de Sagunto con destino a Barcelona. En función de esos mismos cálculos, en caso de que las necesidades de Cataluña se alarguen, como todo apunta, un mínimo de un mes, hasta julio, el coste se elevará a la muy apreciable cifra de 4,8 millones de euros. Está previsto que cada uno de los dos barcos que se utilizarán en esta operación lleve de Sagunto a Barcelona 40.000 metros cúbicos de agua al día.

Joaquín Melgarejo ha dirigido la Cátedra del Agua de la Universidad de Alicante y la Mesa del Agua de la provincia de Alicante. Se trata del experto en esta materia por el que el presidente de la Generalitat Valenciana Carlos Mazón apostó para incluir en la lista al Congreso de los Diputados por Alicante en las elecciones generales de este 23 de julio. Con ello, buscaba llevar a la Cámara Baja una visión objetiva, profesional y científica del problema del agua, alejada de la mera opinión política.

Contaminación energética y ambiental

Pero, además, el experto se ha referido también a dos costes más que elevarán esa factura. Uno de ellos, el derivado del consumo energético que necesitará la desaladora de Sagunto para elevar su producción. Se sabe que no será barato, pero su factura está por cuantificar. Si bien, al estar previsto un importante incremento de la producción también se prevé que ese gasto suba notablemente. Y, otro, el del coste ambiental que ese incremento de producción puede generar.

Esta última cuestión es una de las condiciones que Carlos Mazón ha puesto a la ministra de Transición Ecológica Teresa Ribera para mantener su visto bueno al envío de agua a Cataluña desde la desaladora de Sagunto: que se garantice que habrá un incremento de la contaminación ambiental.

Joaquín Melgarejo ha recordado este martes que el malogrado trasvase del Ebro contaba con un ramal norte capaz de llevar 180 hectómetros cúbicos a Cataluña, que de haberse ejecutado en toda su plenitud hoy día evitaría los barcos cisternas y la sequía. Y, en consecuencia ese gasto de 160.000 euros diarios.

Está previsto que los barcos cisterna empiecen a trabajar en junio.  El precedente es el de Benidorm. También, por la sequía. En 1978, la considerada ciudad-turismo tuvo que abastecerse de dos de esos barcos cisterna. Y, ese año, Benidorm perdió, entre cancelaciones y complicaciones, a la mayor parte del turismo alemán, que se dirigió a otros destinos, como Baleares. Décadas después, aún pelea para recuperarlo en todo su esplendor.

Recortes para el Tajo-Segura

Resulta paradójico que Cataluña, con mejores registros hídricos que la Comunidad Valenciana, necesite el agua de una desaladora valenciana por la sequía, mientras esta última Comunidad se mantiene con sus recursos a pesar de los continuos recortes a que somete al trasvase Tajo-Segura el mismo Gobierno que ahora se vuelca con Cataluña, el de Pedro Sánchez.

La razón estriba en las infraestructuras de uno y otro territorio. En concreto, en las que desde hace casi 100 años se están llevando a cabo en la Comunidad Valenciana tanto por la Confederación Hidrográfica como por la Confederación de Canales del Taibilla. Y, posteriormente, por el Consorcio de Aguas de la Marina Baja, además de los propios agricultores. Y, también, trasvases cómo el Tajo-Segura o el Júcar-Vinalopó.