Así es el palacete del Estado de 1.092 metros cuadrados con gimnasio y sauna en el que vive Armengol
Se trata de una propiedad de Patrimonio del Estado situada a 700 metros a pie del Congreso
La dirigente socialista cuenta con un sueldo de 214.444,86 euros anuales en 14 pagas
La presidenta del Congreso de los Diputados, la socialista Francina Armengol, usa como lugar de residencia el palacete oficial reservado a la tercera autoridad del Estado. OKDIARIO ya pudo constatar este hecho el 15 de septiembre de 2023, revelando en exclusiva imágenes de la dirigente socialista saliendo de esta vivienda. Este palacete cuenta con una superficie de 1.092,80 metros cuadrados, según los datos aportados por la Cámara Baja. Propiedad de Patrimonio del Estado, se encuentra ubicado en el distrito de Retiro a sólo 700 metros a pie del Congreso. La vivienda está compuesta por tres plantas y un garaje en el semisótano, así como ascensor, despacho, salones, dormitorios, gimnasio y sauna. A esto hay que sumar los gastos de agua, electricidad, gas, mantenimiento y seguridad.
La anterior presidenta del Congreso, la también socialista Meritxell Batet, no hizo uso de esta vivienda oficial cuando abandonó el cargo, debido a que estuvo residiendo de alquiler en un piso de Madrid en la pasada legislatura. Este palacete no se usaba como residencia oficial de forma continua desde que Patxi López se instalara en él en su breve mandato como presidente del Congreso. El actual portavoz del PSOE en la Cámara ocupó el cargo de tercera autoridad del Estado entre el 13 de enero de 2018 y el 18 de julio de 2016. El dirigente socialista sí que usó este palacete, lo que provocó una sonada polémica, sobre todo porque su antecesor en el puesto, Jesús Posada (PP), no utilizó esta vivienda con cargo al Estado y optó por residir en un piso de su propiedad ubicado en Madrid.
El PP, por aquel entonces, denunció esta situación al considerar que Patxi López tenía salario suficiente como presidente del Congreso para alquilar una vivienda «digna», ubicada lejos de los privilegios y la suntuosidad del palacete que paga la Cámara Baja con dinero de todos contribuyentes y que ahora usa Francina Armengol.
Patxi López, que vivía de alquiler en un apartamento situado en el barrio madrileño de Chueca, esgrimió «razones de seguridad» para justificar el uso del casoplón ubicado a 700 metros de la Cámara Baja. Esto contrasta con la actitud de otros presidentes como Jesús Posada, Ana Pastor (PP) o la socialista Meritxell Batet, que ejercieron como tercera autoridad del Estado con la misma seguridad en sus domicilios particulares. En el caso de los dos primeros, en pisos de su propiedad, y en el de Batet, en régimen de alquiler, según confirmaron fuentes parlamentarias a OKDIARIO.
Francina Armengol ha vuelto a hacer uso residencial de esta fastuosa finca siete años después. Su sueldo anual como presidenta del Congreso y como diputada del PSOE por Baleares es de 214.444,86 euros en 14 pagas. En su declaración de bienes y rentas con motivo de la nueva legislatura, la ex presidenta del Gobierno de Baleares indica que tuvo allí un salario anual de 71.502,62 euros y que cobró 23.735,71 euros en concepto de dietas. En esta declaración también incluyó un piso en Baleares adquirido en 2002, un Jeep Gran Cherokee de «segunda mano» de 2012 y un saldo de 88.009,88 euros incluyendo aquí un «depósito en cuenta corriente, seguros y un plan de pensiones».
Mandato convulso
La dirigente socialista llegó en agosto de 2023 a la Presidencia del Congreso gracias a un pacto del PSOE con sus socios separatistas. Su mandato ha sido desde entonces convulso en la Carrera de San Jerónimo, empezando por la imposición de las lenguas cooficiales por la vía rápida, sin el debido consenso y con la contratación de traductores temporales incluso antes de aprobarse la reforma del Reglamento.
El coste de la imposición del uso de las lenguas cooficiales en el hemiciclo es de casi 800.000 euros al año para los contribuyentes españoles. Francina Armengol ha defendido el pago de esta cantidad, celebrando que se haya podido hacer «posible» y haber sido «normalizado». «Me pasa a mí misma, que pienso y siento en catalán y valoro enormemente que en la casa de nuestra democracia se puedan defender ideas en mi lengua», ha sostenido en varios actos públicos a los que ha asistido. En su mandato de presidenta de Baleares, excluyó al español en todo el ámbito público e impuso el catalán durante las dos legislaturas que estuvo al frente del Ejecutivo.
Armengol también ha protagonizado varias polémicas en el hemiciclo, como la censura que suele practicar con diputados de PP y Vox al no concederles la palabra para defenderse desde sus escaños de las alusiones vertidas por el resto de partidos. La última gran polémica de la ex presidenta de Baleares se produjo el pasado 7 de junio, cuando pidió el voto para el PSOE para las elecciones europeas en su comparecencia en la comisión de investigación del Senado sobre las ramificaciones del caso Koldo.
«Mi mayor deseo es que el domingo participe muchísima gente en las elecciones y que deje claro que esta no es la forma de hacer política», afirmó Francina Armengol en su última intervención en esta comisión, protagonizando un acto impropio de la que es la tercera autoridad del Estado, debido a que la Ley Electoral prohíbe hacer uso de los «poderes públicos» para hacer campaña. Esta intervención se produjo dos días antes de las elecciones europeas. La ex presidenta balear compareció en esta comisión en el Senado para esclarecer por qué adquirió material sanitario defectuoso a la principal empresa de la trama Koldo cuando era presidenta de Baleares durante la pandemia.