La tercera ola de Covid-19 agudiza el drama del sector hotelero: sólo el 10% está abierto
El 2021 ha comenzado con la esperanza del inicio de la campaña de vacunación frente al Covid-19 en nuestro país. Sin embargo, los datos de la tercera oleada de la pandemia, especialmente tras las vacaciones de Navidad, han ido acompañados por numerosas restricciones que vuelven a limitar la movilidad de los ciudadanos. De este modo, uno de los grandes perjudicados vuelve a ser el sector hotelero, que únicamente cuenta con un 10% de sus establecimientos abiertos en España.
Hay que tener en cuenta que tras la segunda oleada, la situación del sector mejoró ligeramente y muchas de las compañías del sector turístico tenían depositadas sus esperanzas en la campaña de Navidad. Sin embargo, la nueva cepa de Covid-19 detectada en Reino Unido, y las restricciones adoptadas en gran parte de comunidades autónomas para tratar de contener la propagación del virus de cara a la tercera oleada han terminado por poner fin a la posibilidad de registrar unos datos positivos.
Y es que actualmente hay en nuestro país en torno a 15.400 hoteles cerrados ante el desplome de la demanda, muchos de ellos con varios meses de pérdidas a sus espaldas. De acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE) España cuenta con una planta hotelera formada en total por 17.116 establecimientos. Por otro lado, las previsiones de cara a este 2021 tampoco son buenas. A pesar de la confianza depositada en la campaña de vacunación de la población, en los últimos días se ha comprobado que el proceso y la logística que conlleva el proceso hacen que pueda tardarse varios meses en conseguir la famosa ‘inmunidad de rebaño’.
Hay que tener en cuenta que este contexto turístico ha golpeado duramente a las miles de personas que trabajan en el sector hotelero. De hecho, alrededor del 95% de los trabajadores de establecimientos hoteleros ha pasado en 2020 por un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) o se encuentran actualmente en uno. A pesar de la situación tan crítica que atraviesan las plantillas de los cientos de hoteles españoles que se mantienen cerrados, el Gobierno todavía no ha alcanzado un acuerdo con los agentes sociales para extender los ERTE más allá de su fecha limite que finaliza el próximo 31 de enero.
«Falta de ayudas directas»
Una de las principales críticas que realizan desde el sector a la gestión que el Gobierno ha efectuado de esta crisis, es la falta de ayudas directas que se han concedido a las empresas del mundo del turismo. Además, los empresarios y afectados por la situación ponen de ejemplo las ayudas que sí han dado otros países europeos como Alemania o Italia, donde durante los periodos de restricciones las administraciones concedieron a las compañías ayudas directas.
De hecho, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) lamentó que el plan de medidas urgentes de apoyo al sector turístico, hostelería y comercio anunciado durante varios meses por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, y que fue aprobado recientemente por el Consejo de Ministros, no se ajuste a la «dura realidad» que está atravesando el sector del alojamiento y ha reclamado un plan de rescate «específico y urgente».
El sector hotelero ha criticado que han estado «mucho tiempo» esperando un paquete de medidas específicas y no se sienten «representados ni satisfechos» con las propuestas del Ejecutivo puesto que contemplan iniciativas de apoyo y no un plan de rescate, que es lo que necesitan en estos momentos los hoteles y alojamientos turísticos. Por ello, han solicitado una reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que conozca de primera mano la realidad del sector e intentar que la situación se corrija.
Dentro del plan específico para los establecimientos hoteleros de toda España, los afectado demandan en primer lugar, medidas a nivel laboral que protejan a los trabajadores del sector. Así, se reivindica la extensión de los ERTE de manera inmediata durante todo 2021 y la extensión de la bonificación de la Seguridad Social a cargo de la empresa para los trabajadores afectados.
Respecto a medidas fiscales, Cehat demanda la suspensión y exoneración de impuestos cuando no haya actividad, como el IAE, la Tasa Residuos Urbanos de Actividades, la Tasa de Paso de Vehículos, la Tasa de Ocupación de Vía Pública o el IBI, para lo que el sector solicita la modificación de la legislación nacional que impide a los ayuntamientos la exoneración de cuotas del IBI. Gran parte de estas medidas ya han sido aprobadas en otros países de la Unión Europea (UE) y han supuesto un importante alivio para las pequeñas y medianas empresas (pymes) y trabajadores del sector.