Sánchez riega de subvenciones la compra de coches ‘verdes’ pese a la falta de puntos de recarga
El Gobierno de Pedro Sánchez ha sacado la artillería pesada para impulsar la demanda de los coches electrificados -eléctricos puros e híbridos enchufables- excluyendo a los diesel y de gasolina con la puesta en marcha de un nuevo Plan Moves III dotado de hasta 800 millones de euros, tal y como ha anunciado este miércoles la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto. No obstante, los fabricantes del sector de la automoción han avisado al Ejecutivo de que antes tendrá que instalar hasta 17 veces más de puntos de recarga, ya que los consumidores no se deciden por esta compra ante la falta de enchufes en la geografía española.
Así lo han solicitado desde la Asociación Española Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac): «Las empresas del sector están haciendo enormes esfuerzos en inversión, innovación y promoción para mejorar la descarbonización del parque y cumplir los objetivos del país. Pero es necesaria una actuación más contundente y comprehensiva por parte de las administraciones para incentivar la compra de estos vehículos eléctricos -puros e híbridos enchufables- y acompañar al enorme esfuerzo que están haciendo las empresas».
«Pese a la amplia oferta de vehículos disponibles en el mercado un gran escollo a abordar es, la escasez de infraestructuras de recarga de acceso público, tanto a nivel urbano como interurbano», critican.
Desde la patronal calculan que hacen falta 110.000 puntos de recarga para 2025 y 340.000 para 2030. En concreto, para cumplir con el Acuerdo de París y ofrecer una movilidad totalmente sin emisiones en 2050, España necesita 16.000 puntos al final de 2020, 128.000 en 2025 y 307.000 en 2030; con un parque de 112.000 eléctricos en 2020; 1.165.000 en 2025 y 3.765.000 en 2030. No obstante, hay marcas que van aún más lejos. Este es el caso de Renault, que asegura que España es el país de la Unión Europea (UE) que más puntos de demanda necesita para enfrentarse al reto de la descarbonización con 800.000 para 2040.
«El despliegue de la infraestructura de recarga a lo largo del territorio nacional es claramente insuficiente. Los puntos existentes en la actualidad distan mucho del objetivo mínimo para conseguir las cuotas de mercado de vehículo eléctrico necesarias para la descarbonización del transporte», aseguran desde Anfac. Ante este escenario, piden al Gobierno dar prioridad a la incorporación de puntos de recarga, de lo contrario, avisan de que «sobrarán gran parte de los fondos que va a movilizar el Gobierno en el Plan Moves III».
Así, se pondrá en marcha un nuevo plan para vehículos eléctricos puros e híbridos enchufables con al menos 400 millones de euros, que podría alcanzar los 800 millones si el mercado así lo requiere y hay la suficiente demanda de vehículos ‘cero emisiones’. Los vehículos electrificados suponen en 2020 el 4,21% el total del mercado, lo que supone un crecimiento de tres puntos más que durante el año anterior, siendo los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables el 1,95% y el 2,26%, respectivamente, de las matriculaciones registradas.
Los fabricantes piden puntos de recarga
Por su parte, los fabricantes automovilísticos han solicitado incentivos a la compra de coches electrificados y más puntos de recarga para este tipo de vehículos en toda España para así conseguir cumplir con los objetivos de descarbonización del parque actual e incrementar la demanda lastrada por los efectos derivados de la crisis del coronavirus.
Así lo han señalado en una mesa redonda, en el XXX Congreso&Expo Faconauto, el consejero delegado de BMW Iberia, Manuel Terroba; el director general de Dacia España, Francisco Hidalgo; el presidente y consejero delegado de Jaguar Land Rover España y Portugal, Luis Antonio Ruiz, y el consejero delegado de Ford España, Jesús Alonso.
En este sentido, han destacado que las marcas y en general el sector «han hecho lo posible» para cumplir con las exigencias impuestas por las administraciones, pero son necesarios «estímulos del mercado» para alcanzarlos. Así, han puesto el foco en más ayudas a la demanda y en la instalación de infraestructuras de recarga para dar «tranquilidad» y atraer a los clientes hacia unas mecánicas eléctricas o híbridas enchufables.
«La implantación de los puntos de carga es un factor diferenciador de otros países europeos, además de las ayudas, lo que les ha permitido acelerar mucho la venta de coches eléctricos y electrificados, pero hay que poner los medios», ha subrayado Jesús Alonso. Y España se encuentra a la cola.
Tras un año «duro» como fue el 2020, los fabricantes han mostrado su optimismo y todos ellos ha augurado unas mejores ventas, aumentando su cuota de mercado en España. Sin embargo, han advertido de que todo dependerá de cómo evolucione el mercado y de los incentivos de lance el Gobierno para evitar que la demanda de coches caiga aún -en el primer mes del año se desplomó más de un 51,1%-.