PLAN ESTRATÉGICO

Renfe pone en marcha su cabecera internacional con alta velocidad en EEUU y cercanías en República Checa

La nueva Renfe Proyectos Internacionales, creada ayer, nace con los activos de Renfe América y el 50% de Leo Express

El consejo de abril de la operadora nombrará al primer ejecutivo de la nueva filial que estará presidida por Raúl Blanco

Renfe competirá con el AVE en cinco continentes y peleará por gestionar las cercanías de Europa

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Raúl Blanco, preside Renfe desde el pasado 20 de febrero.

El recién nombrado (20 de febrero pasado) nuevo presidente de Renfe, Raúl Blanco, ha estrenado su cargo con el comienzo del ‘cierre’ del plan estratégico de la compañía. El consejo de la operadora ferroviaria pública aprobó en la tarde del lunes la puesta en marcha de su nueva filial Renfe Proyectos Internacionales (RPI), tal como adelantó OKDIARIO. Como ocurre con las otras filiales del grupo Renfe, RPI estará presidida por el propio presidente del grupo y contará con un primer ejecutivo que, previsiblemente, será designado en el próximo consejo de la operadora previsto para principios de abril.

La nueva cabecera internacional de la operadora ferroviaria se constituye con un capital social de 2,3 millones de euros como aportación no dineraria y la posterior integración de dos sus filiales más destacadas: Renfe América (socia del proyecto de alta velocidad entre Houston y Dallas, en Estados Unidos) y la operadora privada checa, Leo Express, de la que Renfe controla el 50% de las acciones; la empresa participa en la gestión de cercanías de Alemania. El resto de filiales internacionales se incorporará paulatinamente al capital y estructura de la nueva empresa.

Renfe Proyectos Internacionales contará con una organización geográfica con representantes destacados a cada área que se encargarán de desarrollar los proyectos locales de alta velocidad. Desde el punto de vista operativo, la nueva RPI contará con cuatro oficinas territoriales encargadas de desarrollar negocio en África y Oriente Medio, Europa, América y Ásia que incluye también el mercado australiano.

Para dotar de contenido a la nueva empresa se le aportarán los activos, actividades, contratos y personal de las distintas filiales que la ferroviaria española tiene en funcionamiento. Las dos primeras han sido el 100% de Renfe América y el 50% de la checa Leo Express.

Constituida en 2019 con un capital de millón de dólares (más de 470.000 euros al cambio actual), Renfe América asesora la ejecución de la línea de alta velocidad entre Houston y Dallas, que recorrerá los 386 kilómetros que separan ambas ciudades en menos de 90 minutos en el estado de Texas (EE.UU.). La compañía española es socio estratégico de la promotora del proyecto, la empresa Texas Central Railroad. La alianza contempla que Renfe asesore y dirija el diseño, la planificación y la construcción de la línea. Una vez concluida esa etapa, RPI se encargará de la operación y el mantenimiento de la línea.

La línea texana es el primer proyecto de alta velocidad ferroviaria en el mundo con mayoría de capital privado. El sistema técnico elegido por Texas Central Railroad es una réplica del sistema japonés del tren bala. Durante su desarrollo, la línea creará unos 10.000 empleos directos y más de mil empleos permanentes durante la explotación.

Cercanías en Centroeuropa

El desarrollo de actividades en Europa se tradujo en la compra del 50% del operador privado checo Leo Express, culminada en agosto del año pasado. La compra -vía ampliación de capital- ha permitido incorporar a tres representantes españoles en el consejo de la compañía.

La razón estratégica de la operación radica en la oportunidad que supone para Renfe para desarrollar su actividad en tres países europeos más (República Checa, Eslovaquia y Polonia) y disponer de los recursos y licencias para acceder al mercado alemán.

Asimismo, permite optar a licitaciones de las denominados Obligaciones de Servicio Público (OSP), como se definen a los servicios de cercanías en Alemania, República Checa, Eslovaquia y Polonia. Contar con Leo Express en la zona permite a la operadora española demostrar su capacidad de implantación local, experiencia, equipo y referencias en esos países que, en la mayoría de los casos, son imprescindibles para acceder a esos concursos de privatización.

Leo Express es una compañía privada que empezó inició sus operaciones en 2012 en República Checa, y desde entonces, se ha extendido a Eslovaquia y Polonia; además de adjudicarse con licitaciones de OSP en la propia República Checa, que es una de las áreas donde buscan crecer. En Alemania opera desde 2017 un servicio open access (abierto a terceros operadores) de larga distancia entre Berlín y Stuttgart para FlixTrain.

Culminar el plan estratégico

La creación de RPI supone, además, la puesta en marcha del último paso del Plan Estratégico de Renfe, que propone un proceso de transformación de la compañía para el horizonte de 2028 basado en tres pilares: la innovación, el foco en el cliente y la internacionalización.

La operadora española, que lleva dos años de desarrollo de su estrategia internacional, se centrará en la búsqueda de negocios relacionados con la movilidad ferroviaria en el sentido amplio: desde el asesoramiento de proyectos, a su diseño y control, la ejecución de los mismos y la explotación de forma directa o indirecta.

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