El rearme de Europa dispara el rendimiento de los bonos y vuelve el miedo a una crisis de deuda
El rendimiento de los bonos soberanos de España, Italia, Grecia y Portugal se disparan al calor del mayor gasto en defensa

Europa se rearma, y se olvida, a la vez, de su crisis de la deuda. La rápida movilización de cara al rearme europeo, que buscar alcanzar el objetivo subrayado de 800.000 billones de gasto en defensa, ha empujado tanto a Alemania y Francia a gastos de deuda más laxos. El apodado bazooka de gasto impulsado por el país anteriormente considerado el país más conservador fiscalmente del continente, el germano, ha empujado el rendimiento de los bonos soberanos a máximos en las últimas semanas.
Aunque la crisis de deuda que acehó al sur de Europa en 2009 queda lejos, España, Italia, Grecia y Portugal siguen siendo los países europeos con la carga de deuda más elevada en el continente. El rendimiento de los bonos de estos cuatros países, que recibieron el apodo peyorativo de PIGS hace 14 años, se ha disparado en 0,25 puntos porcentuales desde que Alemania anunció su plan de gasto.
El camino al objetivo marcha a buen ritmo. El consenso entre los analistas es que la eurozona está preparada, tras años de austeridad y aprietos en sus bolsillos, a enfrentarse a las réplicas económicas que implicará un mayor gasto fiscal. Esta calma se ha visto apoyado por el hecho que España ha mostrado mejoras en las diferenciales de la deuda pública. «La evolución de los diferenciales de los bonos del Gobierno español sobre los bunds alemanes muestra que el sentimiento del mercado hacia España también se está volviendo cada vez más positivo» ha manifestado DWS.
Eiko Sievert, analista de calificaciones soberanas del sector público de la agencia crediticia Scope Ratings por su parte, considera que Alemania está preparada para asumir el nuevo gasto en defensa e infraestructuras, aunque matiza que «mayores niveles de deuda implican mayores gastos en intereses». Además, ha alertado que «eludir continuamente las normas fiscales utilizando fondos especiales podría situar la ratio de deuda de Alemania en una trayectoria ascendente sostenida».
Por otro lado, la compra de deuda aún no se ha ralentizado drásticamente frente al nuevo escenario más volátil que ha llegado a contagiar hasta el mercado de renta fija. Más allá de la inversión explosiva que se ha inyectado en las cotizadas de defensa estos meses, no hay otro activo más de moda que la deuda europea. La compraventa de deuda, tanto pública como corporativa, se ha disparado en las últimas semanas, y ha agarrado más fuelle con el auge del propósito común hacia la defensa. El bund alemán, por su parte, se disparó del 2,5% al 2,7%.
«Históricamente (la renta fija) ha sido un buen escondite para los inversores» ha recalcado Lukas Ahnert, especialista sénior en productos pasivos, del gestor de activos alemán, DWS. «El rendimiento a largo plazo se ha repuntado en Europa, y de forma significativa en los bonos a diez años. Esto está creando nuevas oportunidades para los inversores».