Los precios de los pisos se han duplicado desde la entrada en vigor de la Ley de Vivienda de Sánchez
En el segundo trimestre del 2023, la vivienda general ha crecido un el 7,8% entre marzo y junio de este año
La nueva Ley de Vivienda de Pedro Sánchez entraba en vigor el 26 de mayo de 2023, por lo que ya hace más de un año que esta medida se encuentra en activo. Sin embargo, el coste de la vivienda aumentaba a un ritmo del 3,6% en el segundo trimestre de 2023, mientras ha llegado hasta el 7,8% entre marzo y junio de este año, en la vivienda general, según los últimos datos del INE.
La Ley de Vivienda persigue ayudar a aquellos colectivos con más dificultades de acceso a este bien con medidas como el límite al precio del alquiler o el impulso de las viviendas públicas.
No obstante, como ya indicábamos anteriormente, a estas alturas el precio de la vivienda no ha hecho nada más que subir, después de haberse aprobado esta ley. En concreto, la vivienda general ha subido hasta el 7,8% entre marzo y junio de este año, mientras que en este mismo periodo, la vivienda nueva ha subido un 11,2% y la de segunda mano un 7,3%, una cifra muy superior al 2,9% que crecía hace sólo un año.
Por tanto, el precio de la vivienda nueva es uno de los que más ha crecido, con un 11,2%, mientras que la tasa hace un año era de 7,7%.
Otros de los principales objetivos de la Ley de Vivienda eran establecer un tope a la subida de las rentas del 2% en la renovación anual de los contratos de arrendamiento, ligado al Índice de Garantía de la Competitividad (IGC), y la suspensión de los desahucios de viviendas, que fue prorrogado sucesivamente durante todo 2022 y 2023.
Una demanda enorme y poca oferta
Una de las principales causas de esta fuerte subida de precio es el desequilibrio entre oferta y demanda.
En la última década, se ha evidenciado el desequilibrio entre la oferta y la demanda de vivienda en España, una tendencia que podría intensificarse en los próximos 20 años de mantenerse los actuales niveles de construcción de vivienda nueva.
En concreto, la vivienda nueva se encuentra entre las 80.000 y 100.000 unidades al año, insuficientes para cubrir la proyección de nuevos hogares, que está en torno a las 200.000 familias de media cada año.
Aumentar la oferta hasta unos niveles razonables puede llevar entre 10 y 20 años, pues habría que multiplicar por cuatro el ritmo actual de construcción. Sin embargo, los pequeños promotores se encuentran con obstáculos como la financiación más cara, la escasez de suelo en las grandes ciudades, una falta de mano de obra cualificada y una subida generalizada del precio de los materiales, indica un informe de OBS Business School.
Vivienda asequible y de protección oficial
Hay que tener en cuenta que a día de hoy, Pedro Sánchez sólo ha entregado 350 viviendas de las 183.000 que prometió. En concreto, el 25 de abril de 2023, en plena campaña electoral, el jefe del Ejecutivo prometió 183.000 viviendas públicas.
Así, más de un año después, según el Ministerio de Vivienda, se han movilizado 71.620 y de esas se han firmado 47.209 y se han entregado 350, es decir, según sus propios datos, menos de cuatro de cada diez están en fase de desarrollo. Faltan, por tanto, más de 115.000, de las que ya se ha movilizado la mayoría, pero aún no han comenzado ni a construirse.