Podemos pide que la banca española pague un impuesto solidario para recuperar el dinero del rescate
El Grupo Parlamentario Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea ha presentado una proposición no de ley en la que pide al Gobierno la creación de un impuesto solidario a los bancos privados para recuperar las ayudas públicas para el rescate de las cajas. Este gravamen se aplicaría «sobre los beneficios declarados de todas las entidades financieras privadas que operen en el territorio del Estado español y hayan recibido alguna ayuda pública, sea directa o indirecta».
La vigencia de este impuesto sería temporal, según reza el documento, hasta recuperar todas las ayudas públicas que han recibido las entidades financieras durante el período de reestructuración bancaria de 2009 hasta 2016. Para recuperar el dinero público gastado en las operaciones de rescate, En Comú Podem propone «modificar la legislación necesaria para crear un Impuesto solidario a los bancos privados que tenga como objetivo recuperar las ayudas públicas que se han otorgado en los últimos años a este sector económico».
Según detalla, «este impuesto se aplicará sobre los beneficios declarados de todas las entidades financieras privadas que operen en el territorio del Estado y hayan recibido alguna ayuda pública, sea directa o indirecta» y su vigencia será temporal, «hasta recuperar todas las ayudas públicas que han recibido las entidades financieras entre 2009 y 2016».
A preguntas del líder de En Comú, Xavier Domènech, el ministro de Economía, Luis De Guindos, ha asegurado este miércoles que el Gobierno recurrirá a la privatización de Bankia y BMN, donde mantiene una participación aproximada del 65%, para devolver «la mayoría» del préstamo que pidió al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) por valor de 60.000 millones de euros para sanear el sistema bancario.
«Al FROB le queda el 65% de Bankia y BMN, dos bancos que valen mucho dinero y que vamos a ir privatizando para ir recuperando la mayoría», ha manifestado el ministro, defendiendo la inyección de liquidez llevada a cabo para «sanear» el sistema financiero español» y sin la que «los depositantes tendrían que haber pagado el agujero».