La OCU te ayuda a decidir: ésta es la mejor forma de hacer la compra

El hecho de ir a hacer la compra al supermercado puede ser agradable para algunos, mientras que para otros representa una tarea tediosa. Aunque los establecimientos ofrecen la opción de comprar online desde hace muchos años, fue la pandemia y las restricciones asociadas las que realmente impulsaron su adopción masiva.

Es evidente que la compra online ha llegado para quedarse, y las cadenas de supermercados están haciendo un gran esfuerzo para satisfacer las necesidades de los consumidores. Para ello, invierten en mejorar sus plataformas, al tiempo que reducen los tiempos de entrega y amplían las áreas de cobertura.

Compra en tienda online

Una de las principales ventajas que ofrece esta modalidad es el ahorro de tiempo. Todos los supermercados online permiten crear listas de compra, lo que facilita repetir pedidos con solo unos clics. Esto elimina la necesidad de recorrer físicamente los pasillos del supermercado, buscar productos y hacer cola en la caja, liberando tiempo que se puede dedicar a otras actividades.

Además del ahorro de tiempo, la conveniencia de no tener que desplazarse físicamente al supermercado es otra ventaja destacada. Evitar el esfuerzo físico de ir y venir del supermercado, especialmente en condiciones climáticas desfavorables, es un beneficio que muchos usuarios aprecian.

Además, comprar online ayuda a evitar las compras compulsivas. Aunque se lleve una lista de la compra, es común caer en la tentación de añadir productos que no estaban previsto al carrito mientras se recorre el supermercado. Al comprar en Internet, se tiene un mayor control sobre lo que se compra, lo que ayuda a mantener el presupuesto y evitar gastos innecesarios, tal y como explica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Otra ventaja importante es que, al comprar online, los productos pesados se entregan directamente en la puerta de casa, evitando la necesidad de cargar y transportar grandes cantidades de productos desde el supermercado hasta casa. Esto es especialmente útil para familias con hijos u otras personas que requieren compras en grandes cantidades.

Finalmente, la posibilidad de programar la entrega es una ventaja adicional. En la actualidad, los tiempos de entrega se han reducido significativamente y se puede elegir el momento exacto en el que se recibirá la compra en casa. Esto brinda mayor comodidad y flexibilidad a los consumidores.

Compra en tienda física

Una de las principales ventajas de ir al supermercado es la posibilidad de elegir los productos personalmente y ver lo que se está comprando. Al seleccionar los productos en persona, se puede evaluar la calidad, frescura y apariencia de los alimentos, asegurándose de que se ajusten a las preferencias y necesidades individuales. Esto evita sorpresas desagradables al recibir productos que no cumplen con las expectativas.

Además, la amplia oferta disponible en el supermercado físico puede ayudar a descubrir nuevos productos. Otra ventaja es la oportunidad de ahorrar dinero al aprovechar ofertas y promociones disponibles en el establecimiento, lo cual es un gran punto a favor teniendo en cuenta lo mucho que han subido los precios de los alimentos en los últimos años. La posibilidad de comparar precios y productos en persona puede llevar a decisiones de compra más informadas y económicas.

Asimismo, al hacer la compra en el supermercado físico, se evitan los gastos de envío asociados a las compras online, lo que puede resultar en un ahorro adicional, especialmente para compras más pequeñas o para hogares con pocas personas.

Por último, cabe señalar que ir al supermercado puede convertirse en una actividad social y placentera. Interactuar con otras personas y disfrutar del ambiente del establecimiento puede ser una experiencia gratificante, especialmente para aquellos que buscan salir de casa.

El supermercado más económico

Después de un minucioso análisis de 1108 tiendas en 65 ciudades de toda España, la OCU ha concluido que Alcampo destaca como líder en precios competitivos a nivel nacional. Sin embargo, las opciones más económicas para la compra se encuentran principalmente en cadenas regionales y locales, como Dani en Andalucía, Tifer en Castilla y León, o Más Ahorro en Córdoba. Por otro lado, en el extremo opuesto de este ranking se encuentra la cadena Sánchez Romero, identificada como la más cara para realizar la compra según el análisis de la OCU.

El potencial de ahorro al optar por una cadena de supermercados más económica puede ser significativo, llegando a superar los 1.056 euros al año. Las ciudades con los precios más bajos incluyen a Córdoba y Teruel, seguidas de Burgos, Cádiz, Castellón, Ciudad Real, Cuenca, Jerez, Lugo, Palencia, Puertollano, Vigo y Zamora. Por otro lado, ciudades como Gecho, Las Palmas de Gran Canaria, Madrid y Palma de Mallorca son las más caras.

En Madrid, el ahorro máximo alcanza los 3.928 euros, seguido de cerca por ciudades como Gijón, con 1.871 euros, Valencia con 1.815 euros, y Zaragoza con 1.773 euros. Por otro lado, en lugares como Cuenca, Puertollano y Cartagena, resulta más difícil lograr un ahorro considerable, con cifras que oscilan entre los 430 y los 508 euros anuales.