Hay vida más allá de la cárcel de la Modelo de Barcelona: ¿Qué pasará con el terreno?

Después de 113 años, la cárcel de la Modelo de Barcelona no volverá a abrir sus puertas. No será la «casa» de ningún recluso más. En su patio, se quedarán encerrados todos los recuerdos de los prisioneros que han pasado allí los últimos días de la cárcel y parte de sus vidas.
Los últimos 24 internos de La Modelo se han despedido este jueves, 8 de junio de su «hogar». Fueron los protagonistas de la última cena de la cárcel, que tenía un menú especial para poner un poco de sabor a ese adiós agridulce: gazpacho, ensalada, pizza y helado fueron los últimos platos. Se han trasladado a las cárceles de Brians 1 -que ha tomado el relevo de la Modelo y es el lugar de traslado de los presos preventivos- y Brians 2 y Cuatro Caminos (Quatre Camins).
Entre sus muros se quedarán los secretos de personajes históricos como el anarquista Salvador Puig Antich, el expresamente de la Generalitat Lluís Companys, el empresario Javier de la Rosa o Juan José Moreno Cuenca, ‘El Vaquilla’, que lideró uno de sus más famosos motines. En uno de sus techos, seguirán las huellas de aquel preso que intentó fugarse por el tejado y los motines organizados quedarán reflejados en páginas de archivo.
113 años en 13 relatos
Aunque todas esas cosas y más se podrán imaginar mientras recorren los pasillos de la histórica cárcel. La prisión de Barcelona estará abierta al público desde el próximo 3 de julio hasta el próximo 26 de noviembre de este año. «La exposición pretende dar a conocer a la ciudadanía las condiciones de vida en la cárcel Modelo y algunos de los episodios más importantes de su historia, que al fin y al cabo refleja la historia de Barcelona y de Cataluña», explica a OKDIARIO el comisario de la exposición, Agustí Alcoberro. 113 años se centrarán en 13 relatos ligados a un personaje concreto, una fecha y un concepto histórico: «desde el pedagogo libertario Francesc Ferrer i Guàrdia, condenado a muerte y fusilado en Montjuïc tras la revuelta de la Semana Trágica (1909) hasta Juan José Moreno Cuenca, el Vaquilla, que protagonizó diversos motines durante la época de la Transición».
Podrán verla por dentro, aunque no durante el mes de agosto, mes en el que habrá un parón. Para conocer el interior de la Modelo, en compañía de un guía, tendrán que inscribirse previamente, tanto presencialmente como a través de la página web-.
¿Qué hará el Ayuntamiento con el terreno?
Es la cárcel más antigua de Cataluña y tal y como indicó el consejero de Justicia de la Generalitat, si quería mantener la Modelo, había que hacer una inversión urgente de 25 millones de euros para reformarla.
Después de décadas de promesas políticas, la Modelo echa hoy el cierre. Sin embargo, aún quedan muchas incógnitas por despejar. Las llaves del recinto penitenciario son del Ayuntamiento de Cataluña, pero no llegarán a sus manos hasta finales de año o principios de 2018, según el Ayuntamiento. Durante estos meses, la Generalitat seguirá siendo responsable del terreno.
Los vecinos del distrito del Eixample, lejos de entristecerse por la despedida, están contentos porque el barrio gana más de 28.000 metros cuadrados por el suelo de la Modelo. La Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) y los vecinos del Eixample están satisfechos porque su lucha, de más de treinta años, ha terminado: «ahora, corresponde trabajar para aprovechar bien estas dos manzanas del Eixample, uno de los pocos grandes espacios que quedan por recuperar en Barcelona», explican los vecinos.
Incógnitas por resolver
Quieren trabajar codo a codo con el Ayuntamiento, tal y como hicieron en el año 2009, cuando firmaron el ‘Plan Director de transformación de la prisión Modelo’. «En la pastilla de dos manzanas de L’Eixample se deberían ubicar zonas verdes, la Escuela entença para 450 alumnos, una escuela bressol de 80 plazas, una residencia de personas mayores, un casal de jóvenes, un aparcamiento subterráneo de 200 plazas, un equipamiento de salud mental y un espacio memorial en el lugar donde mucha gente sufrió represión», recoge el plenario municipal de Barcelona del día 1 de abril de 2016, un argumento que subrayan desde el Ayuntamiento.
Sin embargo, el plan de 2009 ha quedado obsoleto, aunque servirá para dibujar juntos los usos de las dos manzanas que deja libres la Modelo. «Creemos que hay que actualizarlo, evidentemente de forma participativa con los vecinos y a partir de aquí, decidir cuáles son estos usos y sobre todo también ver cuál es el conjunto patrimonial conservar y preservar», explica la teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz
El primer equipamiento: una escuela
Hay muchas promesas en el aire, pero la única que ha cogido forma es la construcción de la escuela de L’Eixample I, que comenzará a funcionar durante el curso 2017-2018. La actividad de este centro «se iniciará en unos módulos provisionales que contarán con las instalaciones y aulas necesarias que marca la Ley de Cataluña», apunta Díaz.
«La escuela se ubicará en un solar que pertenece a la isla de la Modelo -pegado a uno de los muros de la cárcel-. Está perfectamente acondicionado y al otro lado del muro ya no hay presos», subraya Díaz.
Si les contaran que la Modelo desaparece a aquellos que vieron en 1904 cómo se levantaban sus cimientos en medio de la Ciudad Condal, puede que no se lo creyeran. A partir de hoy, queda un largo camino lleno de preguntas sin responder sobre qué se construirá en todo ese terreno que todavía, seguirá eclipsado por la histórica cárcel que no llegó a soplar las 113 velas.