Gortázar espera que el impacto de la crisis catalana sea «puntual» y no afecte al crecimiento de 2018
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, confía en que la crisis catalana no tenga una duración prolongada que afecte a la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) del conjunto de España. El directivo espera que este año el órdago independentista no tenga ningún impacto y que el ejercicio concluya con un crecimiento superior al 3%. Es para 2018 cuando hay dudas sobre la repercusión del conflicto impulsado por la Generalitat.
«La situación actual no es buena e incita a diferir decisiones de consumo e inversión», ha admitido Gortázar tras confiar en la «capacidad de los gobernantes para solucionar los problemas» y evitar que la incertidumbre actual «se mantenga durante meses», ya que «si se prolonga la crisis el impacto será muy dañino para el conjunto de la economía».
Para el consejero delegado de CaixaBank, aún es pronto para revisar a la baja el crecimiento del PIB esperado para 2018, tal como ha hecho el Gobierno situándolo en el 2,3%, dos décimas menos que en su anterior estimación. «No es lo mismo una situación puntual como la actual que otra que se extienda durante más tiempo… si la crisis perdura en el tiempo entonces las expectativas de crecimiento económico se reducirán», ha añadido.
Gortázar también ha hablado del futuro de la política monetaria y ha considerado que la Reserva Federal de Estados Unidos «tiene que liderar el fin de la política de expansión cuantitativa y gradualmente Europa debe hacer lo mismo». A su juicio, en 2018 «se darán pasos hacia la normalización monetaria en la UE, lo cual será una buena noticia porque significará que la economía tiene fortaleza.
El primer ejecutivo de CaixaBank ha recordado que la «política monetaria ultra expansiva ha sido clave para sacar a la Unión Europea de la situación en la que estaba», aunque en la actualidad está castigando las cuentas de resultados de las entidades financieras. No obstante, CaixaBank se ha blindado parcialmente contra este entorno de tipos de interés en mínimos históricos mediante la diversificación de su actividad, más allá del negocio recurrente de captar depósitos y conceder créditos.
De hecho, la clave de que CaixaBank haya logrado el mejor resultado de su historia al cierre del tercer trimestre a pesar de la política de tipos del Banco Central Europeo (BCE) es, precisamente, la diversificación hacia productos de ahorro a medio y largo plazo. La cuota de mercado actual del grupo en seguros, planes de pensiones y fondos de inversión es del 21,8% por recursos gestionados.
En los primeros nueve meses de 2017 las suscripciones, primas y aportaciones de los fondos de inversión gestionados por la entidad sumaron 2.834 millones de euros, lo que supone un incremento del 12,7% respecto a septiembre de 2016. Por su parte, en los planes de pensiones el volumen alcanza los 1.237 millones de euros (un 43% más interanual) y en seguros de ahorro 6.554 millones de euros, es decir, un 11% más que al cierre del tercer trimestre del pasado año.