Francia y Alemania preparan un nuevo superestado europeo con política monetaria propia
Los ministerios de Exteriores de Francia y Alemania están diseñando una hoja de ruta para crear un superestado europeo que ponga fin al actual modelo de integración comunitaria y que acabará con la estructura monetaria del euro. Según documento elaborado por las autoridades galas y germanas, al que ha tenido acceso OKDIARIO, el proceso ha comenzado y podría desembocar en la ruptura de la eurozona en dos o tres regiones que tengan políticas monetarias independientes.
El proyecto retoma la vieja idea de la “Europa a dos velocidades” y constata un hecho que está en el germen de los problemas económicos de la eurozona: no es posible tener una política monetaria adecuada para todos los países. Por ejemplo, en la actualidad, el Banco Central Europeo (BCE) está manteniendo una estrategia expansiva para permitir que algunos estados, como España, se endeuden a bajo coste para financiar sus déficits, mientras que otros países del norte de Europa verían con mejores ojos una política monetaria más restrictiva para mantener la fortaleza del euro.
El documento elaborado por Francia y Alemania ha pasado desapercibido para los grandes medios de comunicación desde que fue filtrado a la web de Polonia TVP.info, aunque ha sido publicado en páginas webs especializadas como GurusBlog. El informe tiene nueve páginas y plantea un modelo de integración comunitario que va contra las bases del sistema actual y que abandona la terminología actual, sustituyendo el concepto “Unión Europea” por una “Europa” que estaría conformada por Francia, Alemania y los países del Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo).
Esta nueva Europa tendrá una plena integración fiscal, una política monetaria propia y un departamento del Tesoro con sede en Bruselas e independiente del Banco Central Europeo (BCE) para adoptar todas las decisiones económicas. El documento no deja claro si se mantendrá la actual UE al margen de Francia, Alemania y Benelux -o si este proyecto la sustituirá- pero lo que sí deja claro es que la nueva Europa surge por culpa de las crisis de los países del sur y del Este de la actual UE.
En el documento se pone en duda “la supervivencia de la divisa comunitaria en el largo plazo” si no se realiza un “cambio en la arquitectura del euro” porque “los países con déficits públicos y los que tienen superávits no pueden seguir bajo una misma política monetaria”. Por ello “Francia y Alemania tienen la responsabilidad de organizar un proceso de convergencia económica y de gobernanza política” al margen de la Comisión Europea.
El informe que supone la primera piedra de esta hoja de ruta lo firman los ministros de Exteriores de Francia, Jean-Marc Ayrault, y de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, y ha visto la luz de forma precipitada debido al éxito de los partidarios de la salida de Reino Unido de la UE en el referéndum del Brexit.
No son los únicos que se han posicionado al respecto: el ex primer ministro de Bélgica Guy Verhofstad ya definió los seis puntos que considera claves para conformar este nuevo superestado europeo. No se trata de teorías conspiranoicas, sino de movimientos geopolíticos reales que podrán provocar la ruptura de la eurozona y generar diversos tipos de euros (el euro A y el euro B) para las distintas regiones en las que se divida la actual UE.
El proyecto de superestado europeo no se limita sólo a medidas económicas, sino que también contempla medidas en materia de seguridad, defensa y política exterior, planteando la necesidad de que el control fronterizo de los distintos estados sea controlado por el eje franco-alemán.
El economista Francisco Saavedra González, colaborador de OKDIARIO, ya alertó el pasado septiembre de los peligros que se avecinan en Europa tras la victoria del sí en el referéndum sobre la salida de Reino Unido de la Unión Europea. Saavedra avanzó que el empeño que antaño tenían socialistas del Viejo Continente en construir un superestado europeo ha cesado y lo que pretenden tanto Alemania como Francia es romper la Unión tal y como la conocemos.