¿Todos los inversores son iguales? El porqué de los perfiles de riesgo y la diversificación

¿Existe una única respuesta, válida para cualquier persona, sobre si es mejor tener una vivienda en propiedad o vivir de alquiler? ¿Se puede decir sin temor a equivocarse que todos los estudiantes deberían estudiar una carrera universitaria o que, por el contrario, la mejor salida para todos ellos es la Formación Profesional?

Seguro que has respondido negativamente a las dos preguntas. De la misma manera, no todos los inversores deben invertir de la misma forma. Las circunstancias personales, los objetivos o la actitud vital ante el riesgo son variables imprescindibles a tener en cuenta a la hora de realizar una inversión inteligente. Fuera del mundo de los grandes patrimonios, raramente encontrarás a una entidad financiera que realice un análisis exhaustivo de tus circunstancias personales y seguimiento de tus objetivos, algo absolutamente indispensable para invertir tu dinero de forma óptima de acuerdo a tus necesidades.

El mejor modo (y el que indica la normativa) para ello es un test de idoneidad que de un modo sencillo permite obtener la información relevante para acomodar las circunstancias personales de cada inversor en la estrategia de inversión más adecuada. Específicamente deben analizarse la experiencia y conocimientos, su situación financiera y los objetivos de inversión, con especial relevancia de la pérdida máxima que estarías dispuesto a asumir, con dos aspectos claves respecto al riesgo: Capacidad para asumir riesgo y Tolerancia al riesgo.

En el primero se trata de evaluar aspectos objetivos que permiten medir la capacidad del inversor para soportar un determinado nivel de riesgo en función de su edad, situación patrimonial, obligaciones financieras presentes y futuras, etc.  En el segundo se trata de medir aspectos subjetivos en relación a su actitud vital ante el riesgo buscando siempre un grado de consistencia elevado.

La combinación de ambos aspectos determina el perfil de riesgo del inversor y la cartera asociada al mismo. Pero no podemos olvidarnos de que las circunstancias personales del inversor pueden –de hecho, suelen- variar a lo largo del tiempo. Por ello es imprescindible revisar el perfil establecido siempre que las circunstancias hayan variado y, al menos, una vez al año. El uso de alarmas automáticas ayuda a la actualización de la información requerida.

Bien, ya hemos segmentado a los inversores. Ahora querrás saber qué “menú” hay para cada perfil. De la dieta mediterránea se alaba especialmente la riqueza en micronutrientes que contiene y las proporciones en los nutrientes principales que guardan sus recetas.

Valga este símil con la dieta mediterránea para entender la enorme importancia que tiene la estrategia de inversión mediante la cual se decide cómo distribuir las inversiones entre las diferentes clases de activos que existen (el famoso “asset allocation”). Según todos los estudios existentes, aproximadamente el 90% de la rentabilidad de una inversión depende de este factor.

Para obtener una cartera óptima los activos a incluir deben ser suficientemente representativos de los distintos mercados financieros globales, con el objetivo de que proporcionen una diversificación adecuada. Gran parte del trabajo que hemos realizado desde Finanbest antes de recomendar una inversión concreta, está basado en el estudio, elaboración e implementación de una distribución de activos que permita tener una cartera diversificada y óptima, tanto desde el punto de vista de perfil de riesgo, como desde la optimización del binomio rentabilidad/riesgo (basado en el algoritmo Black-Litterman, del que hablaremos en otra ocasión).