El fiasco del tope al precio del alquiler del Gobierno: sube un 9% el coste y reduce la oferta un 17%

El sector inmobiliario insiste en que la medida que limita al 2% la subida del precio del alquiler en los contratos que deban revisarse – impuesta desde abril del año pasado- ha sido un fiasco. Prueba de ello es que el precio del alquiler ha subido casi un 9% en febrero en comparación con el mismo mes de 2022, mientras que la oferta de viviendas en régimen de arrendamiento se ha reducido un 17% en el último año.

La directora general de la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (ASVAL), María Andreu, explica a OKDIARIO: «La limitación del 2% a las subidas del alquiler sin establecer compensaciones, al igual que el resto de las medidas que sobrerregulan este sector, genera una gran inseguridad jurídica en el mercado».

En su opinión, esta incertidumbre deriva en que los propietarios «retiran sus viviendas del mercado». Por tanto, además de no lograr el objetivo de reducir los precios del alquiler, esta tipo de medidas reducen el stock disponible. «Esta escasez de oferta en alquiler, sumada a la elevada demanda, dificulta el acceso de las familias vulnerables a una vivienda y las deja sin alternativa, puesto que España tiene un exiguo parque de vivienda social», matiza Andreu.

En febrero, el precio medio del alquiler en España se ha situado en 11,7 euros por metro cuadrado, lo que supone un aumento del 8,7% en comparación con el mismo mes de 2022, según datos del portal inmobiliario idealista. «La subida de precios que estamos viendo en el mercado del alquiler responden a dos cuestiones. La primera es el incremento de la demanda, a la que se une la clara reducción de oferta en el mercado del alquiler», asevera la directora general de ASVAL.

En concreto, la oferta de viviendas en alquiler se ha reducido un 17% durante el cuarto trimestre del año pasado, en comparación con el mismo trimestre del año pasado, según idealista. Mientras que en el tercer trimestre de 2022 la caída de stock fue mucho más abultada: se desplomó un 25%.

Andreu asegura que la caída del stock disponible es «consecuencia de la sobrerregulación existente» en el mercado durante los últimos años. De hecho, señala que medidas como la limitación de subidas del alquiler al 2%, el control de precios o el amparo de la ocupación ilegal ahondan en la inseguridad jurídica y desconfianza de los propietarios, que optan por retirar sus inmuebles del mercado. «Los más afectados por esta escasez de oferta y por la subida de precios son las familias vulnerables, que son a las que se dicen proteger con este tipo de medidas», matiza.

Reclamaciones al Estado

Desde el pasado mes de noviembre, ASVAL está tramitando todas las reclamaciones que los propietarios de viviendas en régimen de alquiler han presentado contra el Estado por prorrogar durante los seis primeros meses de 2023 el tope del 2% en las subidas a los precios de los alquileres.

Según la asociación, lo que los propietarios demandan es «una compensación por parte del Estado». Asimismo, «piden seguridad jurídica en el mercado del alquiler. Para ello, se debe generar un marco regulatorio estable y duradero, que de confianza».

Para concluir, ASVAL insiste en que hay que solucionar la emergencia habitacional. Para ello, pide apostar por la colaboración público-privada. «La Administración tiene la obligación de proveer de vivienda social a familias vulnerables, pero debe contar con los recursos del sector privado para poder llevar a cabo. Los propietarios están dispuestos a ser parte de la solución», defiende.