La falta de piezas hunde a Volvo: paraliza su producción y amenaza la entrega de miles de coches

Volvo suspenderá la producción en su planta belga la próxima semana después de que los ataques a buques en el mar Rojo interrumpieran la cadena de suministro de la compañía. Una paralización de los ensamblajes que afectará de lleno a uno de los bestsellers del fabricante automovilístico y que amenaza con retrasar miles de entregas previstas para el primer trimestre del año. La parada de las líneas de producción de Volvo se suma a la anunciada por Tesla en su planta alemana de Berlín y a la que se podrían sumar más marcas en las próximas semanas por la falta de piezas.

Así lo han confirmado fuentes del sector, en conversaciones con este diario, que han señalado que «la crisis derivada de los ataques en el mar Rojo ha obligado a Volvo a paralizar la actividad en su planta en Gante (Bélgica), que detendrá la producción de automóviles durante tres días después de que los barcos que trasportan las cajas de cambio retrasará la entrega de las unidades para su ensamblaje este lunes por los desvíos para evitar la violencia en el mar Rojo, una de las rutas marítimas más transitadas del mundo».

Los ataques de militantes hutíes respaldados por Irán, en solidaridad con el grupo islamista palestino Hamas en su lucha contra Israel en Gaza, han interrumpido una de las rutas marítimas más importantes del mundo, obligando a los buques portacontenedores a viajar a través del sur de África y evitar el Canal de Suez. Un cambio de la ruta que añade 10 días más y que supone un coste en combustible de un millón de dólares para un viaje entre Asia y Europa.

Un ataque que se ha intensificado este viernes tras los ataques aéreos de Estados Unidos y Reino Unido contra objetivos hutíes en Yemen para evitar una crisis de comercio mundial que amenaza con disparar el coste de los coches por el incremento de los gastos de los fabricantes de automóviles en logística.

Volvo para su producción en Bélgica

En la planta belga de Gante, el fabricante automovilístico sueco produce algunos de sus modelos más vendidos a nivel mundial: el XC40 y el C40. En concreto, el XC40, un SUV urbano, es el modelo más vendido de la marca en el mercado español, con casi 7.000 unidades matriculadas en 2023, hasta ocupar casi la mitad de las ventas de Volvo en España al cerrar con 14.000 operaciones.

Una paralización de los ensamblajes que amenaza con provocar un retraso en las entregas de las unidades de los clientes que esperaban recibir su coche en los tres primeros meses del año, tal y como han señalado las citadas fuentes en conversaciones con OKDIARIO.

Tesla también para en Berlín

No sólo Volvo. Tesla suspenderá la mayor parte de la producción de automóviles en su fábrica cerca de Berlín (Alemania) durante dos semanas, desde el 29 de enero al 11 de febrero, debido a la falta de componentes provocada por los cambios en las rutas de transporte debido a los ataques a buques en el mar Rojo, ya que las compañías navieras evitan el Canal de Suez y desvían los buques mercantes que viajan entre Europa y Asia a través del Cabo de Buena Esperanza en Sudáfrica.

Una planta ubicada en la ciudad alemana de Gruenheide en la que la compañía Elon Musk produce el Model Y, el coche más vendido en Europa. El fabricante automovilístico quiere duplicar la producción anual hasta un millón de vehículos desde su objetivo de 500.000 unidades y planea añadir la producción de un vehículo eléctrico más asequible de 25.000 euros. No obstante, podría obligar a Tesla a redefinir sus previsiones.

«Tesla depende en gran medida de China para los componentes de las baterías, que deben ser transportados a Europa a través del mar Rojo, lo que pone en constante riesgo la producción en su planta alemana», señalaron fuentes del sector.

Una lista a la que en las próximas semanas se podrían sumar otros fabricantes como Volkswagen o BMW, que por el momento aseguran no haber sufrido ningún problema relacionado con el abastecimiento de piezas. Por su parte, Geely, el segundo mayor fabricante de automóviles de China por ventas, señaló el pasado 22 de diciembre que sus ventas de vehículos eléctricos probablemente se verían afectadas por un retraso en las entregas, ya que la mayoría de las empresas navieras que utiliza para exportar vehículos eléctricos a Europa desvían los barcos hacia África.