Esteyco y Acciona compiten con Repsol por el proyecto de eólica marina en La Coruña

Esteyco y Acciona se unen a Repsol y presentan una solicitud de una concesión administrativa en el Puerto de La Coruña para la construcción de componentes con los que se realizará la instalación de eólica marina, según han contado fuentes cercanas del proyecto a OKDIARIO y así ha sido confirmado públicamente. En este proyecto de elaboración de piezas en la ciudad herculina compiten otras empresas como Navantia, Saitec, Nervión, Cobra y Ferrovial.

Este medio ha tratado de contactar con Esteyco y Acciona en busca de mayor información acerca de las expectativas de ambas empresas relacionadas con este proyecto pero no ha obtenido respuesta por el momento.

Según estas mismas fuentes, se estarían tramitando dos solicitudes nuevas, pero aún no han trascendido los nombres de las entidades que las realizan. Estas mercantiles «están interesadas en desarrollar industria eólica marina en el puerto exterior, fundamentalmente para la exportación a Francia y Escocia», dado que es donde se están construyendo los parques.

De esta manera, las entidades que logren entrar en el Puerto de La Coruña para construir materiales para eólica marina mantendrán la línea de Repsol y exportarán la producción hasta que en España se desarrolle la oportuna legislación, más probable con un Ejecutivo de otro color.

Elevada competencia

Dado el número de solicitudes, y pese que el puerto cuenta con alrededor de un millón de metros cuadrados, «es difícil que todos puedan entrar». Por esa razón, «las empresas están como locas», es decir, la competencia es elevada por adquirir una pieza de esta tarta.

La construcción del material necesario para la eólica marina debe hacerse en puertos dado que esto facilita su traslado a los lugares en los que se instalarán los molinos. Es por ello por lo que se ha generado una gran expectación por conseguir espacio en este puerto exterior conocido como Punta Langosteira y que podría ser punta de lanza del resto de España.

Este puerto coruñés ha sido, según explican desde su portal oficial , «una de las obras en ejecución más importantes tanto por la importancia y complejidad de las obras, como de su incidencia para la Comunidad Autónoma Gallega». Está situado en el municipio de Arteixo, conocido por albergar las instalaciones de Inditex,  y se encuentra «a unos 7 km al suroeste del casco urbano de la ciudad de A Coruña, en las inmediaciones del polígono de Sabón y de la población de Suevos». Tanto sus características, su tamaño y al estar aún sin explotar son elementos que atraen la atención de los inversores.

El acuerdo con Repsol

El pasado miércoles se informó del único acuerdo que la Autoridad Portuaria de La Coruña ha sellado hasta la fecha. Repsol, de la mano de la compañía energética noruega Orsted, llevarán a cabo «el desarrollo, construcción, operación y mantenimiento de futuros proyectos de eólica marina flotante», un proyecto que será pionero en España. No obstante, dados los límites de la legislación, no se contempla que la producción se quede en el país hasta «un futuro», según se declara a este medio.

Ambas compañías han expresado que la firma de este acuerdo supone un «paso importante» para alcanzar el objetivo de producir de 1 a 3 gigavatios (GW) de energía eólica marina instalada para 2030.

El gerente de mercado de eólica marina en España y Portugal de Orsted, Marianne Hassl, afirmó que «Galicia está llamada a convertirse en una región clave para la eólica marina en España y Orsted y Repsol están dando ya pasos para construir las alianzas adecuadas que garanticen que estamos listos para empezar a construir desde el día uno». Por su parte, el responsable de Desarrollo de eólica marina en Repsol, José Partida, expresó que la región tiene potencial para ser «un hub destacado» para «aprovechar las oportunidades que ofrece esta fuente de energía».

Esto indica que las empresas esperan cambios legislativos en un tiempo reducido, probablemente después de las elecciones del próximo 23J. Con dichas modificaciones, las mercantiles estarán preparadas para seguir los pasos de otros países europeos en los que la tecnología de la eólica marina se ha puesto ya de moda como Francia, Reino Unido o Dinamarca.