¡Christine Lagarde, y la Era de las reformas!

“Comienza haciendo lo que sea necesario; entonces haz lo que sea posible; y de repente estarás haciendo lo imposible» San Francisco de Asís

Como guionizado en Hollywood, Christine Lagarde le puso la guinda a su discurso de presentación al mundo financiero con una cita de San Francisco de Asís. No en vano, cuando recitaba la frase anteriormente citada no puedo negarles que me venía a la cabeza la larga sombra de su predecesor, Mario Draghi. Aquello tan célebre que forma parte de la salvación del euro; “haré lo que sea necesario y créanme, será suficiente”, parece claramente la inspiración de una Lagarde que recoge el testigo de Draghi, eso sí, con un matiz importante y una espada de Damocles dirigida a los Estados; haz lo que sea posible y de repente estarás haciendo lo imposible. ‘Chapeau’ para la presidenta por esa sutil y necesaria presión hacia los líderes políticos.

No me extraña que Lagarde comience su mandato con esta contundencia, puesto que el BCE ya ha quemado todos sus cartuchos, ¿no les parece?; tipos negativos, subvención a la banca para prestar y compra de activos sin fecha de caducidad. Al BCE no le queda otra opción que ejercer de abogado del diablo, y advertir a los Estados miembro que si no hay reformas, ¡nos vamos derechitos a la recesión! Por supuesto que la Sra. Lagarde se excusa sobre la guerra comercial, a la vez que advierte sutilmente que el BCE sigue monitorizando los efectos secundarios de la expansión monetaria, dejando caer que éstos serán menos dañinos si los Estados apoyan de una vez por todas, y no hacen caso omiso de sus advertencias.

Con tal discurso inaugural considero que todo el foco del BCE se va a centrar en forzar las máquinas, para que asistamos a un proceso reformista en Europa. Lograrlo, será su éxito y convencer a una clase política que vive en la inestabilidad más bipolar de la historia reciente, será su trabajo. ¿Las recetas? probablemente vayan más allá de las palabras, pero en su convicción y en dichas palabras hay esperanza, al menos para mí.

Nuestra economía sigue deteriorándose a marchas forzadas

Es obvio que Europa sigue convaleciente e inundada de una burocracia que detesto. Los extremos cada vez son más fuertes y nuestra sociedad ha puesto a la política en primera línea mediática. Aquella política que antes era aburrida para la gran mayoría, hoy se convierte en absoluto foco mediático, incluso para muchos al nivel del partido de fútbol del domingo, lo cual no considero nada bueno. Como decían en Roma ‘panem et circense’.

Mientras los partidos políticos en Europa siguen crispados y sumidos en gobiernos en minoría, nuestra economía sigue deteriorándose a marchas forzadas, siendo el crecimiento esperado de este año del 1,1%, un 0,7% menos de lo esperado hace un año. Esta caída en barrena de la economía, se debe principalmente a la evidente inoperancia de los Estados y a una falta de liderazgo latente, de la que España no es la excepción puesto que los datos de crecimiento por encima de la media, se deben más a una recuperación de lo que los otros anteriormente ya han hecho. España necesita un gobierno estable, aprobar presupuestos y antetodo, ¡reformas!

Como bien sabe la Sra. Lagarde y así lo dejó caer en su discurso; “¿Qué pueden hacer las políticas públicas para desarrollar aún más nuestra demanda interna y potencial de crecimiento, al tiempo que alientan a las empresas dinámicas y competitivas a nivel mundial?” Claro está que la nueva presidenta del BCE, no solamente invitó en su discurso a los Estados miembros a tomar medidas para reactivar la demanda interna, sino que deja claro que no se debe olvidar en ningún momento a las empresas, puesto que la palabra “alentar” para mi es clave en su ‘speech’. En efecto, las políticas fiscales son una solución a corto plazo, pero incrementar el gasto público dura lo que dura el presupuesto, y fomentar la iniciativa privada, o como dice Lagarde “alentar” a los emprendedores, ¡es la clave para evitar que Europa entre en recesión!

Espero sinceramente que nuestros políticos sean responsables en la formación de gobierno y en la ejecución de un programa político, que si bien no excluye que se ayude a incrementar la demanda interna, se centre en incentivar lo que realmente crea empleo y dinamismo; ¡a los emprendedores! en caso contrario, ni San Francisco de Asís nos librará de una nueva recesión.

Gisela Turazzini, CEO, Blackbird Broker.