BlackRock tendrá que ratificar la alianza de GIP y Criteria Caixa en el consejo de Naturgy
BlackRock tiene que ratificar el pacto que tienen GIP y Criteria en el consejo de Naturgy, que suman el 47% del capital
La compra, por parte de BlackRock, de Global Infrastructure Partners (GIP) conlleva que el mayor fondo de inversiones del mundo tenga que decidir qué hace con el pacto parasocial que tienen firmado GIP y Criteria Caixa en Naturgy. GIP tiene el 20,6% del capital de Naturgy -que ahora controlará BlackRock-. Y Criteria Caixa, el brazo inversor de la Fundación Caixa, es el primer accionista con el 27,6%. Los dos tienen firmado un pacto de cara a la representatividad de cada una de las partes en el consejo y en las comisiones de la energética.
BlackRock anunció la compra de GIP el pasado 12 de enero por más de 11.000 millones de euros. En principio, la operación no está claro que tenga que recibir el visto bueno del Gobierno español, pero se trata de una empresa estratégica que ya ha sufrido importantes batallas en su accionariado en los últimos tiempos.
Mientras se cierra la operación, BlackRock ya ha hecho saber que no forzará ningún cambio sobre la situación actual en el gobierno corporativo de Naturgy, pero se trata todavía de los primeros compases de la operación. Ésta todavía no está cerrada y aprobada por las autoridades nacionales e internacionales correspondientes.
Además, justo en estos momentos el Gobierno de Pedro Sánchez tiene encima de la mesa el problema de Telefónica, donde tiene que decidir si permite la compra del 10% de la operadora a los saudíes de STC -ya tiene el 4,9%-. Alimentar más problemas para una compañía estratégica no es lo mejor para los intereses de BlackRock en Naturgy.
Por lo tanto, cuando se cierre la operación y BlackRock tome el control definitivo de GIP, tendrán que pronunciarse sobre el pacto con Criteria Caixa y su máximo dirigente, Isidro Fainé. De acuerdo con el pacto parasocial que se mantiene vigente, según el informe de gobierno corporativo, las dos partes «asumieron compromisos relativos al gobierno corporativo de la Sociedad y que tienen por objeto el respeto el derecho a la representación proporcional, tanto en Consejo como Comisiones» (sic).
En virtud de este acuerdo, la proporción de cada accionista en el consejo está pactada por más del 46% del capital, lo que le da una estabilidad a la compañía que debe ser ratificada ahora.
En base a esa proporción, el fondo australiano IFM se quedó sólo con un puesto en el consejo después de alcanzar algo menos del 11% en la OPA parcial lanzada sobre la energética en 2021. Poco a poco, ha ido aumentando su peso en el capital comprando más títulos hasta este mismo jueves, cuando ha comunicado a la CNMV que ha superado por primera vez el 15% de la gasista.
Y, en virtud de ese acuerdo, Criteria Caixa se lanzó a comprar acciones de Naturgy en plena OPA de IFM, hasta que superó el 26% del capital. Pasar ese umbral le dio derecho a tener un tercer puesto en el consejo de Naturgy.
Estabilidad en Naturgy
Ahora, Criteria tiene tres consejeros, CVC y GIP dos cada uno e IFM, uno. Además, está el presidente y tres independientes. Acabados esos movimientos, Naturgy ha entrado en una etapa de estabilidad que sólo se ha truncado con la batalla de nombrar un nuevo consejero delegado y con la decisión del Gobierno de prohibir a la gasista desarrollar su plan de separar la empresa en dos partes, el famoso Proyecto Geminis. Este objetivo está oficialmente parado, no abandonado, a la espera de que los mercados mejoren.
En cualquier caso, la situación accionarial de Naturgy está siempre en el ojo del huracán, porque tanto GIP como CVC llevan mucho tiempo ya en el capital de la gasista y los fondos suelen vender sus participaciones en las empresas después de un tiempo prudencial, que ya está superado en el caso de la energética -GIP lleva siete años ya en el capital de la energética y CVC, cinco-.
El problema es que no es fácil vender una participación del 20% en una compañía en la que no se va a mandar porque hay otro accionista principal, en este caso Criteria Caixa. Hacer un desembolso tan importante para no mandar no es habitual, pese al movimiento de IFM.