La banca teme la propuesta de Rufián de imponer un tope a las hipotecas a tipo variable

Gabriel Rufián, portavoz de ERC en el Congreso, quiere imponer a la banca un tope a las hipotecas de tipo variable, lo que ha puesto en jaque al sector bancario. Tras la investidura de Pedro Sánchez, los bancos además tendrán que hacer frente a la prolongación y subida del impuesto al sector bancario.

Una nueva amenaza se cierne sobre la banca española que puede ser mucho peor que la prolongación y subida del impuesto al sector: se trata de un posible tope a las hipotecas a tipo variable, que Gabriel Rufián, portavoz de ERC, planteó a Pedro Sánchez en el debate de investidura.

Al enumerar los «pasos hacia delante» que, a su juicio, debe tomar el presidente del Gobierno en la situación actual, Rufián planteó «avanzar en topar tipos de interés de las hipotecas variables».

Fuentes del sector financiero aseguran que no es la primera vez que se plantea esta medida, sino que ya ha salido a colación en algún foro. Es decir, es una idea que ronda al Gobierno más allá de las exigencias de Esquerra (no hay referencia a las hipotecas en el acuerdo firmado con el PSOE), lo que incrementa las posibilidades de que salga adelante.

Esta propuesta consiste en poner un límite (una especie de cláusula techo) a las subidas que pueden experimentar las cuotas de las hipotecas a tipo variable, aunque el euríbor (más el diferencial de cada préstamo) al que están referenciadas se sitúe por encima de ese nivel.

De nuevo, estaríamos ante una medida populista que en teoría pretende ayudar a las familias que han sufrido un fuerte incremento de la cuota hipotecaria por culpa de las subidas de tipos del BCE para combatir la inflación. Pero, aparte de ganar votos, no tiene demasiada motivación: las medidas de ayuda a los hipotecados en apuros del Código de Buenas Prácticas apenas han registrado peticiones.

El objetivo real es asestar otro golpe a la banca, el chivo expiatorio favorito del Gobierno para todos los problemas de la economía.

Acabar con los márgenes

Y, en efecto, el sector financiero tiene mucho miedo a una medida de este estilo, puesto que destrozaría sus márgenes. Después de muchos años en que estos han permanecido en mínimos por los tipos negativos del BCE, este año por fin han crecido con fuerza gracias a las alzas de los intereses, hasta superar el 4,2% en el caso del euríbor. Esta subida se traslada a créditos e hipotecas variables cuando les toca la revisión anual; de hecho, a la mayoría les tocarán dos revisiones al alza, como ha informado el Banco de España.

Por tanto, poner el tope que pide Rufián supondría un golpe durísimo, porque impediría trasladar los tipos oficiales a las cuotas de las hipotecas y hundiría los márgenes de las entidades. Su impacto dependería de las condiciones finales: de dónde se sitúe ese tope, de si se hace de forma retroactiva o a futuro, etc.

En todo caso, la eventual imposición de este techo tendría serios problemas jurídicos, puesto que las hipotecas son contratos entre dos partes (el banco y el cliente) de obligado cumplimiento. Esta medida implicaría un incumplimiento del mismo por una causa que no está prevista en el contrato, con lo cual las entidades podrían recurrir la norma a los tribunales, al igual que han hecho con el impuesto a la banca.

Respecto a este tributo, como adelantó OKDIARIO, el Gobierno tiene decidido no sólo hacerlo permanente sino subirlo con la excusa de que la banca va a reducir sus aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos y al Fondo Único de Resolución europeo. Y así se lo está comunicando el Banco de España a las entidades para que lo tengan en cuenta en su planificación.