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Abril va a ser un drama: estos son todos los impuestos por los que vas a tener que pagar más

La factura de la luz y otros impuestos que suben a partir de abril

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Descubre los impuestos que suben en abril
Blanca Espada

El año 2024 ha empezado con mal pie para los bolsillos de los españoles. La crisis energética que se desató en 2021 y que provocó una escalada de los precios de la luz y el gas parece que nos vuelve a afectar en forma de subidas de impuestos que afectarán a nuestra factura eléctrica y a otros servicios básicos. A continuación te explicamos cuáles son estos impuestos, cómo han variado y cómo te van a impactar en los próximos meses.

Una de las medidas más importantes que tomó el Gobierno para aliviar la presión sobre los consumidores fue la bajada temporal del IVA de la electricidad del 21% al 10% para todos los clientes con una potencia contratada de hasta 10 kW y un consumo de hasta 140 kWh al mes. Esta medida se aplicó desde junio de 2021 hasta diciembre de 2023, con una prórroga de tres meses hasta marzo de 2024.

Sin embargo, desde este mes de marzo de 2024, el IVA de la luz vuelve al 21% para la mayoría de los usuarios, lo que supondrá un incremento de más de un 10% en el importe final de la factura.

El impuesto eléctrico sube al 3,8%

Otro de los impuestos que grava la factura de la luz es el Impuesto Especial sobre la Electricidad (IEE), que se aplica sobre el coste de la producción de la electricidad. Este impuesto se calcula sumando los importes del término de energía y el de potencia contratada, y se aplica antes del IVA. El tipo impositivo del IEE era del 5,113%, pero se rebajó al 0,5% en junio de 2021 y se mantuvo así hasta junio de 2022. Después se elevó al 2,5% hasta marzo de 2024, y a partir de abril subirá al 3,8%.

El impuesto sobre la producción de la energía pasa al 5,25%

El tercer impuesto que afecta a la factura de la luz es el Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica (IVPEE), que se aplica sobre los ingresos que obtienen los productores de electricidad por la venta de energía en el mercado mayorista. Este impuesto se creó en 2013 con el objetivo de reducir el déficit de tarifa, y tiene un tipo del 7%. Sin embargo, debido a la crisis energética, se redujo al 0% desde septiembre de 2021 hasta diciembre de 2023, y después se recuperó de forma gradual. Así, el IVPEE ha tenido un tipo del 3,5% hasta marzo de 2024, y pasará a tener un 5,25% hasta junio.

Impuesto sobre la nómina

Además de los impuestos que afectan directamente a la factura de la luz, tenemos que mencionar también que el salario mensual de los empleados se reducirá por el aumento del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI). Este sistema reemplaza al Factor de Sostenibilidad que se aprobó en la reforma de las pensiones de 2013 y consiste en un tributo que se puso en marcha en 2023 para pagar la futura jubilación de la generación del «baby boom». Este año, el MEI implica una cotización extra del 0,6%. De este porcentaje, el 0,5 puntos son responsabilidad de los empresarios y el 0,1% se le descuenta a los empleados. Su cotización ascenderá hasta el 1,2% en 2029 de manera gradual. Así, en 2024, será del 0,7% (0,58% por parte de la empresa y 0,12%, del trabajador).

¿Qué podemos hacer para ahorrar?

Ante este panorama de subidas de impuestos y volviendo a la factura de la luz, los consumidores tienen pocas opciones para reducir el impacto en su economía doméstica. Una de ellas es revisar sus contratos de luz y gas y buscar las ofertas más baratas y adaptadas a sus necesidades. Para ello, se puede recurrir a los comparadores de tarifas, que permiten comparar las distintas opciones disponibles en el mercado y elegir la más conveniente.

Otra opción es mejorar la eficiencia energética de nuestros hogares y hábitos de consumo, lo que nos permitirá reducir el consumo de energía y, por tanto, la factura. Para ello, se pueden seguir algunos consejos como:

  • Ajustar la potencia contratada a la que realmente necesitamos, lo que nos ahorrará el coste fijo de la factura.
  • Aprovechar la tarifa horaria, que ofrece precios más bajos en determinadas franjas horarias, y programar los electrodomésticos para que funcionen en esos momentos.
  • Usar bombillas de bajo consumo o LED, que consumen hasta un 80% menos que las convencionales.
  • Mantener una temperatura adecuada en el hogar, entre 19 y 21 grados en invierno y entre 24 y 26 grados en verano, y evitar el uso excesivo de la calefacción y el aire acondicionado.
  • Aislar térmicamente las ventanas y puertas, lo que evitará las pérdidas de calor o frío y mejorará el confort.
  • Apagar los aparatos que no se estén usando y desenchufar los que tengan modo stand-by, que siguen consumiendo energía aunque no estén en funcionamiento.

Estas medidas nos ayudarán a reducir el consumo de energía y a mitigar el efecto de las subidas de impuestos en nuestra factura tal y como ya se comprobará en la factura de marzo y especialmente la de abril.

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