«Que nos sirva de lección, con la camiseta no se gana a nadie»

«Esto nos tiene que servir de lección». Con esta lacónica frase, a mitad de camino entre el aprendizaje y la advertencia, se expresó Zidane ante sus jugadores después de la pifia del Real Madrid ante el Legia de Varsovia. Los blancos tenían ganado y resuelto el partido en 25 minutos con 0-2 en el marcador, pero pagaron caro sus pecados de soberbia y el desbarajuste táctico montado por el propio entrenador.

Zinedine Zidane ha sido el primero en hacer autocrítica. El técnico francés asume que el planteamiento inicial con cuatro delanteros no funcionó. La idea de Zizou es que el equipo «tuviera siempre cuatro jugadores en el centro del campo, no sólo Kroos y Kovacic», explica uno de los miembros del cuerpo técnico del Real Madrid.

Sobre la pizarra, el entrenador madridista había dibujado que Carvajal y Coentrao acompañaran a los dos mediocentros en ataque y que Bale y Morata se juntaran a ellos en defensa para que la zona central del campo siempre estuviera bien ocupada. Pero eso sólo ocurrió al principio del partido. Desde el 0-2 ni los de arriba bajaron ni los de abajo subieron, por lo que el Real Madrid acabó partido en un 4-2-4 mortal para sus intereses.

Zidane no quería hacer «una alineación política para contentar a nadie, porque nunca ha sido su estilo», aseguran sus ayudantes. Sí quería el técnico francés probar con los cuatro delanteros por si fuera necesario utilizarlos en momentos puntuales de los partidos cuando el Real Madrid vaya por detrás. Pero el experimento salió rana.

Pero al entrenador francés no sólo le preocuparon en Varsovia los errores de su propia pizarra, sino la actitud un tanto pasota de sus futbolistas. «Si creemos que vamos a ganar los partidos sólo con la camiseta y el escudo del Real Madrid, estamos equivocados», dice Zizou.

No es la primera vez, ni mucho menos, que el entrenador madridista manda un aviso a sus jugadores. Lo hizo la pasada temporada –tras perder el derbi del Bernabéu o después del mal partido en Las Palmas– y también esta temporada después de pinchar en casa ante el Eibar. Ahora el técnico madridista espera que la zidanina haga efecto de forma inmediata.