El presidente del Athletic denuncia amenazas por parte de ultras: «Hijo de puta te vas a enterar»

El presidente del Athletic Club, Jon Uriarte, denunció a la Ertzaintza «insultos y amenazas» por parte de un ultra que le persiguió en plena calle al grito de «hijo de puta, te vas a enterar». Todo sucedió en la noche de este miércoles después de que su equipo venciera al Real Madrid (2-1) en San Mamés en el partido de la jornada 19 de Liga, adelantado por la disputa en enero de la Supercopa de España en Arabia Saudí.

Este lamentable incidente que ha denunciado a las autoridades el directivo bilbaíno tiene que ver con la guerra abierta que mantienen desde el club con el sector radical de la grada Herri Harmaila al que pertenecía este ultra que le amenazó. «Deja de tocarnos los cojones», le gritó este individuo a Uriarte refiriéndose a su grupo de hinchas.

Unos hechos que tanto el Athletic como su presidente han considerado muy graves y por los que han decidido ponerlos en conocimiento de la policía vasca. Este ultra, que habría estado en ese momento junto a sus amigos, le dijo también que fuera «con guardaespaldas» por la calle, unas palabras de auténtico pavor para Uriarte.

Esta información, adelantada por El Correo, denota un aumento de la crispación existente entre la Herri Harmaila, que opinan que están viviendo «una represión» en los partidos, y el Athletic. Así como demuestra una subida de la violencia ultra en nuestro país y en el mundo, con múltiples incidentes de este tipo que se han producido a lo largo de 2024.

La guerra del Athletic con los ultras

En la última asamblea del club vasco hubo varias críticas hacia la gestión de la junta directiva y, especialmente, a las denuncias y sanciones contra algunos socios impuestas por la policía. Sin embargo, el secretario de la misma, Jon Salinas, defendió en todo momento el modo de actuar del Athletic: «El club solo ha expulsado a una persona, que tiene una orden de prohibición de entrada a los campos del fútbol, y lo único que hacemos es cumplir esta orden legal».

Así, negó que el Athletic fuera el instigador de los nueve juicios que abonados rojiblancos tenían en marcha por esas sanciones por un conflicto que se evidenció días más tarde en el choque de Europa League contra el Elfsborg en San Mamés. Ese día hubo una huelga de 30 minutos al inicio del mismo convocada por la Herri Harmaila, mientras que el resto de la grada de animación sí que estuvo con el equipo en ese intervalo de tiempo, opacando así el silencio de este sector, que también protestó al final del partido cuando los jugadores de su equipo se acercaron a su zona.

En el comunicado en el que avisaban de dicha huelga, el grupo de ultras explicó su decisión por la «represión» policial que dicen que están viviendo y la cual entienden como un desplante del club. «Unos de los aspectos más alarmantes de esta situación es el abandono que han experimentado las personas afectadas por parte del Athletic Club. Nos encontramos con un club que ha dado la espalda a sus propios socios y socias, como aficionados, dejándoles desprotegidos y sin respaldo», clamaron, valorando que «la junta directiva hace tiempo que decidió posicionarse del lado de la Ertzaintza».