Nadal vuelve en forma y vence a Mannarino en su estreno en París

Rafa Nadal regresó a las pistas con victoria. El tenista de Manacor sufrió para conseguir su primer triunfo en el Masters 1.000 de París tras imponerse en dos sets (7-5 y 6-4) al francés Adrian Mannarino. Volvía un mes después de su lesión en la muñeca que le obligó a renunciar a la gira asiática y lo hacía ya como casado. La pasada semana jugó un partido de exhibición en Kazajistán donde derrotó a Novak Djokovic. Ahí ya demostró que estaba en forma pero llegaba el momento de la verdad en la tierra que tantas alegrías le ha dado.

Mannarino le aguantó el tipo durante todo el encuentro. Ayudado por sus 11 aces conseguía mantener su servicio sin darle ninguna opción al que será número uno del mundo a partir del próximo 4 de noviembre. Rafa no encontraba la forma de batir al tenista local. Le estaba dando mucha guerra y no sabía cómo contrarrestarle. No fue hasta el octavo juego cuando el español disfrutó de su primera pelota de rotura.

El ojo de halcón se alió con él. Mannarino le había metido un buen resto para poner el 4-4 pero la tecnología corrigió al juez de línea, la bola era fuera. Acto seguido, Nadal, dispuso de pelota de break para encarrilar la primera manga. Pero el francés sacó la artillería pesada y evitó la rotura con tres grandes saques. Rafa volvería a tener una nueva opción de break en el siguiente juego de saque de su rival, pero otra vez lo salvó el francés con buenos servicios.

Estaba apretando el español, poco a poco se acercaba a la rotura y al final lo consiguió. Con 6-5 a su favor, se puso 0-40 arriba con el saque del galo que salvó las dos primeras pero no pudo con la tercera. Nadal conseguía cerrar un primer set en el que Mannarino plantó batalla a base de saques. El primera paso estaba dado. Sin embargo, el número 43 del ranking no dio su brazo a torcer en la segunda manga.

Igual que en el primero, Nadal comenzó mandando con su servicio. El francés iba a remolque pero se mantenía gracias, como no, a su potente primer saque. Mientras tanto el español seguía con su plan, buscando el break a base de restos ganadores para intentar acabar con la resistencia del tenista francés. Con 4-4 llegaron los primeros problemas de Rafa al servicio.

Tuvo que sudar para conseguir apuntarse el noveno juego, eso sí, sin conceder una bola de break. Estaba bastante firme al saque. Tocaba restar para intentar cerrar el partido y no falló. Nadal se puso 15-40, dos pelotas de rotura, y a la primera le puso el lazo. El francés volvía a fallar la última bola como en el primer set y Rafa alzaba el puño para celebrar su primera victoria tras la lesión. Ha vuelto a lo grande, con un buen triunfo ante un tenista que no se rindió y plantó batalla hasta el último segundo.

Ahora se enfrentará al suizo Stan Wawrinka por un puesto en los cuartos de final del último Masters 1.000 de la temporada. Wawrinka viene de vencer por un doble 7-6 al croata Marin Cilic. Será la primera prueba de fuego para el tenista de Manacor. El balance entre ambos es favorable a Nadal, que domina el frente a frente por 18-3. Lo cierto es que el español ha demostrado que ha vuelto en forma.