Mario Hermoso responde a los que creen que es un central blando
Al igual que ha admitido que no le gusta jugar como lateral zurdo, Mario Hermoso ha dicho que va fuerte a por los balones divididos.
El central del 24 años, al que este verano fichó el Atlético a cambio de 25 millones de euros, cantidad que se repartieron a partes iguales Espanyol y Real Madrid, ha comenzado a tener continuidad en los últimos partidos. En los últimos cinco choques Mario Hermoso ha sido titular, algo a lo que ha hecho alusión en la última entrevista que ha concedido.
«El futbolista se siente feliz cuando juega y participa. Son prácticamente los primeros partidos que juego al máximo nivel con el Atlético, enlazados, en Europa… Mientras me vaya adaptando así, será bueno para todos», ha comenzado diciendo el defensor en As.
Mario Hermoso ha reconocido que es la oportunidad que estaba esperando desde que llegó al Atlético de Madrid, aunque ha señalado que «es un poco desagradable porque llega por la lesión de un compañero, pero nuestra labor es estar listos. Intento hacerlo lo mejor posible y que el míster sepa que estoy aquí, como cuando vine. Tiene un futbolista más para contar con él».
Mario Hermoso ha reconocido abiertamente que no le gusta jugar como lateral izquierdo
Aunque se le fichó por su polivalencia, el ex del Espanyol ha aprovechado la ocasión para manifestar que no le gusta jugar como lateral izquierdo: «Es una posición en la que he jugado, pero no es que me agrade mucho, la verdad. Sé que siempre hay necesidades en el equipo y donde me toque jugar en beneficio del grupo lo haré. Si me toca de lateral o donde sea, allí estaré. A veces hay que sacrificarse».
Mario Hermoso, que prefiere jugar como central izquierdo, llegó a jugar como centrocampista: «Sí, ha sido mi evolución. Primero extremo, después lateral y ahora central. Va en el momento y luego los entrenadores piensan que puedes ser más útil en una posición o en otra. En mi caso, creo que ha dado resultado».
Por último, cuestionado por aquellos que le consideran blando por su buen toque de balón, el madrileño ha declarado: «Quien me considere blando no me conoce y poco me ha visto jugar. Algunos de los aspectos que siento como virtudes son ir fuerte a los balones divididos, salir bien a las coberturas, tapar los espacios, intentar siempre contener esos desajustes que haya. Sí, quizá llama más la atención el toque o un pase en largo, pero son complementos que hacen que un jugador sea más importante. Pero yo creo que el míster me trae porque soy buen defensor; si no, no estaría aquí».