El líder también sabe ganar remontando (95-100)

El Real Madrid está en un momento en el que se siente capaz de superar cuantas piedras le pongan en el camino. San Pablo Burgos se quitó la careta de novato para comandar su duelo con los blancos durante muchos minutos, pero gracias a una nueva exhibición grupal, los de Pablo Laso culminaron la remontada (95-100) para celebrar un nuevo triunfo y seguir líderes e invictos en Liga Endesa.

Los jóvenes del Real Madrid demostraban poder dar la talla en la élite, como ya han hecho otros días, pero esta vez desde el inicio. A falta del debut del niño Garuba, Yusta y Radoncic se las ingeniaban para anotar, defender y asistir con total normalidad, como si sus edades estuvieran más cercanas a los 30 que de los post adolescentes que son. Las penetraciones de Santi y el IQ de Dino acabarán siendo constantes en el futuro madridista.

Burgos, al contrario de lo ocurrido en otros encuentros, no se dejó amedrentar en el primer cuarto. Después del 29-6 sufrido en el último choque, los de Diego San Epifanio plantaron cara con su segunda unidad, tanto es así que Schreiner y Sáiz se convirtieron en pesadillas para los jugadores blancos.

El Real Madrid no se encontraba cómodo en la cancha y Schreiner, curtido en mil batallas ya en a ACB, hizo las veces de líder para construir un parcial que daba la vuelta al marcador. A los blancos les pesaba también el cansancio de dos duros partidos jugados entre semana, y frente a un rival poderoso en lo físico y confiado en sus posibilidades, el cóctel no prometía la mejor de las reacciones.

Laso dejó de lado su plan rotativo y acumuló a Reyes y Ayón en pista, pero el plan no funcionó debido a la intensidad de los pívot burgaleses, entre los que destacó Sebas Sáiz, cedido por el Real Madrid en Burgos, que merced a sus larguísimos brazos se estaba haciendo dueño y señor de la zona merengue.

El comienzo de la segunda parte calcó al de la primera. Burgos mostraba su calidad, contraria a su posición en la tabla, pero Jaycee Carroll aparecía para demostrar a los novatos cómo se penaliza una mala defensa en la Liga Endesa. El Real Madrid estaba acechando de nuevo el liderato, pero Deon Thompson, estrella del proyecto castellanoleonés, echó abajo el Coliseum de Burgos con un mate confirmatorio de las posibilidades de los locales de acabar venciendo.

Con el último periodo ya en marcha, Facundo Campazzo se confirmó como estilete en el intento de remontada, mientras que Sáiz y Reyes vivían un duelo generacional que puede ser también el del Madrid dentro de un par de años. El encuentro estaba tomando unos tintes preciosos y Rudy emergió con un tapón y un triple seguidos que dieron una ventaja, mínima pero jugosa, a los blancos.

El Madrid tenía el partido en su mano pero los nervios parecieron afectar al MVP de lo que va de temporada, Luka Doncic, pero otro MVP del pasado, Rudy Fernández, puso el lazo al choque con un nuevo triple en una victoria, una más con 100 puntos, para un equipo que no para de callar bocas.