Un Federer arrollador acaba con la racha de Nadal

Roger Federer volvió a ganar a Rafa Nadal por cuarta vez este año. El tenista de Basilea se impuso en dos sets por 6-4 y 6-3 en un partido que dominó de principio a fin. Le tiene comida la moral al balear, que sigue sin conocer la victoria ante el suizo, pese a que jugó un buen tenis. Pero Roger no concedió ni una sola oportunidad de break con el saque y aprovechó la mínima oportunidad al saque para llevarse el Masters 1000 de Shanghai.

El número dos del mundo comenzó implacable, rompiendo el saque a Nadal en el primer juego del partido. El balear salvó dos bolas de break, pero a la tercera fue la vencida y el suizo se apuntó el primer juego del duelo. Estaba muy cómodo desde el fondo de la pista, jugando largo y rápido tanto de derecha como de revés y el número uno no encontraba la manera de meterle mano, parecía imposible.

Nadal no terminaba de encontrarse cómodo, como si le estuvieran pasando factura esos tres partidos perdidos con su rival este año (Australia, Indian Wells y Miami). Siguió haciendo su juego, cada vez mejor, especialmente al saque, a la espera de que el helvético bajara un poco el nivel con su servicio para poder tener opciones en la primera manga.

El saque mantenía al español en el partido puesto que al resto estaba desaparecido, provocado por un Federer estratosférico, que recordaba al de principios de año, ese que ganó Australia, Miami, Indian Wells y Wimbledon. Pero al final nada pudo hacer para evitar que se apuntara la primera manga por 6-4. Sin duda la gran diferencia estuvo en los golpes ganadores, donde el actual número dos de la ATP se imponía con 16 winners.

Roger tenía el partido donde quería, tal y como lo había trabajado. Puntos cortos y rápidos, sin dar muchas opciones al intercambio donde sabe que Nadal puede hacerle daño. Se mostró intratable con su servicio, no cometió apenas errores ni dio una mínima posibilidad al número uno de romperle el saque, no tuvo ninguna bola de break en todo el primer set y el saque perdido al inicio del choque le terminó pasando factura al de Manacor.

Batalla por el número uno

En el segundo todo comenzó igualado, ambos se apuntaron sus tres primeros juegos al saque, aunque el suizo sufrió para apuntarse su segundo servicio del set, donde aparecieron las primeras ‘dudas’, aunque no fue más que un espejismo. Se rehizo y en el siguiente juego puso contra las cuerdas a Nadal y le endosó el primer break de la segunda manga que a la postre sería decisivo para hacerse con el encuentro.

No había forma de poner en jaque al suizo con su saque, el cansancio de la gira asiática empezaba a pasar factura al balear mientras Roger seguía a lo suyo, sacando a las mil maravillas sin conceder una sola oportunidad con su servicio. Rafa no tuvo opciones en ningún instante, se vio dominado por el helvético que jugó uno de sus mejores partidos de la temporada y se terminó llevando el partido al resto (6-3).

El número uno no peligra para Rafa Nada pese a la derrota, seguirá en lo más alto. La victoria le aseguraba casi matemáticamente terminar el año como rey de la ATP, otra vez, como en los viejos tiempos, pero tendrá que esperar. Había mucho en juego y ninguno de los dos quería ceder. De momento Federer se ha llevado la primera batalla por el número uno.