Estados Unidos apunta a España para desarrollar el fútbol de cara a ‘su’ Mundial de 2026
El Mundial de 2026 ha llevado a Estados Unidos a ampliar su oferta de captación de talento futbolístico en pos de desarrollar un deporte que se ha consolidado ya como referencia en Europa o América del Sur
El fútbol es uno de los deportes que más ha evolucionado en los últimos tiempos en Estados Unidos. Si bien es cierto que partía prácticamente de cero, en una zona en la que la tradición gira alrededor del football –fútbol americano– y no hacia el soccer, la condición de deporte rey a nivel global llamó la atención de los norteamericanos, líderes en explotación de producto a través del marketing.
El avance del soccer en Estados Unidos se entiende a través de los cada vez más ambiciosos proyectos de la MLS o la NWSL, que sí es referencia a nivel mundial junto con la selección nacional femenina, pero también en la inversión en la base, con un sistema de caza de talentos futbolísticos que ha ampliado las redes en España, uno de los países con mejor materia prima en el ámbito futbolístico.
Con 2026 en el horizonte y el Mundial que organizarán de la mano de Canadá y México, los High School privados han llegado hasta a España para reclutar talento y así, comenzar a subir el nivel medio de competitividad en su territorio, aún a años luz del de Europa. Los institutos ofrecen oportunidades y hay un reducido grupo de unos 10, que han lanzado en territorio español dos becas ‘premium’, en las que se permite que chicos o chicas de entre 14 y 17 años puedan estudiar y residir en sus instalaciones, solamente a cambio de desplegar sus cualidades futbolísticas.
Las ayudas ascienden a los 65.000 euros por persona y lejos de otras becas con múltiples requisitos, destacan por su simpleza y facilidad para acceder a ellas. En tiempos de coronavirus, el acceso a otros países a través de visados se encuentra en muchos casos paralizado, pero a través de estas becas sí se puede llegar a Estados Unidos y comenzar a cumplir un sueño dos en uno: la formación y el desarrollo futbolístico en un gran campus.
Con el dinero de la beca se puede pagar todo el curso académico de la temporada 2021-22, además de asesoría completa para consecución de la ayuda y también sufragar algunos gastos, como el siempre caro billete de avión a Estados Unidos. El formato, de una ambición digna de mención, es pionero en España y busca el equilibrio entre la formación y el desarrollo deportivo, con el fútbol en este caso como elemento central.
El director de la organización que gestiona las becas en España, Deaquiparafuera, habló del proyecto que puede suponer un cambio en este ámbito de cara al futuro. «Llevamos muchos años trabajando con becas para que chavales españoles estudien en EEUU. Pero jamás habíamos tenido la oportunidad de ofrecer una beca completa para financiar al 100% un año escolar en estos centros”, explica José Manuel Díaz, sobre el programa bautizado en España como ‘Becas DPF Pro’. “Es una oportunidad única que no sabemos cuándo volverá a repetirse”, añade.
“Es cierto que en España hay programas similares, pero no son tan completos. Por ejemplo, las becas de la Fundación Amancio Ortega dan ayudas al curso completo, pero los chavales estudian en colegios públicos y alojan con familias. En nuestro caso se financia el curso completo para High Schools privados y los chicos viven en residencias del propio colegio, lo que les permite recibir visitas familiares o regresar a España durante las vacaciones del curso escolar”, añade Alberto Albertos, Consejero Educativo de Deaquiparafuera.
«LaLiga también tiene un programa de becas educativas, pero sólo las concede un máximo de 3.000 euros de apoyo a chicos en edad universitaria y que jueguen en canteras de equipos de Primera o Segunda. En nuestro caso, está abierto a todo aquel que demuestre un nivel futbolístico alto, juegue en el equipo que juegue», explica Albertos, comparando el proyecto con el de la institución referente en España.
Requisitos básicos y un comité de profesionales
Hablábamos de los escasos requisitos para acceder a las generosas becas, y estos se resumen en dos. El primero tiene que ver con la media académica, que debe ser de un mínimo de siete sobre 10, contando todas las asignaturas, y la segunda, cómo no, con el fútbol. Hay que mostrar un nivel moderadamente alto para ser escogido en el programa Becas DPF Pro, pero los condicionantes de corte económico, social o geográfico no serán importantes más allá de que los chavales candidatos, chicos y chicas, residan en España y estén cursando desde 2º de la ESO a 1º de Bachillerato. El talento futbolístico y su formación marcarán el resto del camino.
Un comité de expertos integrado por profesionales españoles y estadounidenses evaluará cada candidatura y escogerá a los diez mejores de los que saldrán los dos ganadores previa realización pruebas más específicas. Las candidaturas descartadas no se quedarán sin premio y podrán contar también con ofertas de los High School, aunque de menor calado económico.
«El pensamiento generalizado es que no se puede viajar a Estados Unidos a causa de la pandemia, pero en nuestro caso y en el de la Beca DPF Pro, no hay problema ninguno. El visado que concede el Gobierno de EEUU para nuestro programa sigue vigente y funcionando con mayores garantías incluso sanitarias», concluye José Manuel Díaz, sobre un proyecto que aúna ambición, educación y desarrollo con el fútbol como centro de todo.