El día en que Negreira estuvo salpicado por un caso de soborno en la UEFA en 1984
Enríquez Negreira vivió otro caso polémico como árbitro: estuvo salpicado por un caso de soborno en la UEFA en 1984
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La actualidad, cuando viene de los Juzgados, es irrevocable, inapelable, y no se duda de ella. Joaquín Aguirre concluyó este jueves que el Barça cometió soborno tras analizar el ‘Caso Negreira’ y exponer en un duro auto que los culés lograron con sus más de siete millones de euros abonado al ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros habían surtido los «efectos deseados». La hemeroteca también tiene su aquel, sobre todo en la gran mancha que deja Negreira.
Enríquez Negreira no cuenta con este caso como el único en el que se dudó de él por soborno. Durante su actividad sobre el terreno de juego, el colegiado también estuvo presente en un encuentro en el que también se concluyó que estuvo amañado, que se vulneró la honorabilidad de los árbitros y sus decisiones, su neutralidad.
Fue en el año 1984, durante la vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA entre el Anderlecht y el Nottingham Forest, tras el 2-0 a favor de los ingleses, cuando la sospecha se cernió sobre los colegiados tras un partido de esos que denominan raros, raros, raros. Emilio Guruceta Muro fue el colegiado de aquella contienda y en la banda tuvo como ayudantes a Crespo Aurré y al protagonista mediático de los últimos meses, Enríquez Negreira.
Un millón de francos, lo que actualmente son unos 24.800 euros, fue lo que pagó el por aquel entonces presidente del Anderlecht belga a Guruceta. Fue Constant Vanden Stock el que sobornó al colegiado en dicho partido para que las decisiones arbitrales fueran en favor de su equipo, algo que él mismo reconoció ante la justicia de Bélgica en 1997, cuando se investigó el caso y se concluyó que fue amañado.
En la vuelta el colegiado pitó un penalti en favor de los belgas que se tildó de inexistente y además se anuló un gol del Nottingham Forest tras una falta que generó más que dudas, gol que podría haber dado el pase a la final al conjunto inglés que por aquel entonces entrenaba el mítico Brian Clough. El Anderlecht acabó ganando aquel partido por 3-0, tras el 2-0 de la ida de los ingleses, logrando el pase de manera ajustada y con la duda más que sembrado.
El Anderlecht fue sancionado por soborno
La investigación de la UEFA concluyó, tras la confesión de Vanden Stock, que aquel encuentro contó con el soborno a Guruceta y castigó al club belga con un año de suspensión de las competiciones europeas –aunque el TAS tumbó la decisión–, llevando el castigo para el presidente hasta el infinito, suspendido de por vida. Fue la acusación en los juzgados del intermediario en el pago entre el presidente y el árbitro, lo que llevó a Stock a confesar. Guruceta, por su parte, no pudo testificar en este caso ya que falleció en el 87 en un accidente, tampoco lo hicieron ni Negreira ni Crespo Aurré, sus linieres, que negaron su participación en dicho soborno, aunque para cuando fue investigado ya habían prescrito.
En el ‘Caso Negreira’, cabe recordar que el juez ha mencionado que cuando el Barça dejó de pagar a Enríquez Negreira tras salir del CTA, éste mandó «una carta intimidatoria» a Josep Maria Bartomeu, con amenazas para que continuara haciéndolo ante la posibilidad de que revelara lo sucedido durante tantos años de relación ‘profesional’.
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