El Barça pasa a la final con lo justo
El Barcelona ganó 2-0 a Osasuna en la semifinal de la Supercopa de España con goles de Lewandowski y Joao Felix
Los azulgranas se medirán al Real Madrid el próximo domingo en la gran final
El Barcelona no faltará a su cita con el Real Madrid tras ganar a Osasuna y el próximo domingo los dos transatlánticos del fútbol español se verán las caras en el estadio Al Awwal Park, donde se celebrará el próximo domingo a las 20:00 hora peninsular española la final de la Supercopa de España. Los azulgranas vencieron al equipo navarro con los goles de Robert Lewandowski y Joao Felix en la segunda mitad.
Comenzó activa la segunda semifinal de esta Supercopa de España. Fría en la grada, mucho más que en un derbi donde Arabia Saudí dejó claro que late por el Real Madrid. Antes del minuto 10, el Barcelona pisó con peligro en dos ocasiones el área de Osasuna, mientras que los navarros lo hicieron en tres y todavía con mayor amenaza que un conjunto azulgrana que vistió de blanco a pesar de ser local, cosas del marketing.
Y por cosas del dinero, no se puede explicar de otra manera, la Supercopa de España, como le pasará la próxima semana a la de Italia, se está jugando en Arabia Saudí, donde en pleno 2024 y a los 10 minutos de un partido que juega el Barcelona, la grada no duda en ponerse a corear el nombre de Messi. Para más inri, en la casa de Cristiano Ronaldo.
Opciones para ambos
Los minutos iban pasando y llegó el show de Sergio Herrera. Pasional como pocos el portero de Osasuna, que hizo una gran intervención abajo a disparo de Lewandowski y lo celebró girándose y señalando el escudo de Osasuna a un fondo que minutos antes le había abucheado. El más de medio millar de aficionados rojillos no dudó en empezar a corear el nombre de un guardameta que es todo corazón.
Tras unos minutos de vértigo y divertimento, el encuentro empezó a entrar en una fase de calma que terminó de aplatanar a una grada que sentir lo que es sentir la emoción del fútbol, no lo siente. El Barcelona comenzó a tocar la pelota y a hacerse dueño de la contienda, aunque con poco peligro. Sólo un cabezazo de Lewandowski a la salida de un córner que se marchó rozando el palo sobresaltó a Sergio Herrera y a un Osasuna que buscaba la contra, aunque con poca calidad, para generar peligro.
El momento de Osasuna… que no fue
Y en estas, mientras el partido entraba en una fase soporífera en la que nada pasaba, Osasuna decidió dar un paso al frente para generar peligro de verdad. Primero, tras un excelente cambio de juego hacia Eraso, éste asistió a Budimir, que rompió a Araujo tirándole un caño y, delante de Iñaki Peña, se topó con el meta azulgrana. A continuación, Arnaiz hizo lo propio, pero esta vez con su compañero Budimir, cuando disparaba delante de la meta azulgrana. Por último, lo intentó el de Talavera con un remate directo de falta que paró el meta azulgrana.
Tres ocasiones que pusieron en alerta al Barcelona y que provocaron el punto final de Raphina en esta semifinal. El brasileño se lesionó y tuvo que ser sustituido antes del descanso. En su lugar entró Lamine Yamal y no Joao Felix, algo curioso. Con poco más se vivió en una primera parte donde ambos pudieron ver puerta, pero ninguno la hizo.
Lewandowski lo ganó
En el arranque de la segunda mitad, el Barcelona salió mejor, aunque sin generar grandes ocasiones de peligro para desesperación de una afición saudí que se empezaba a aburrir. Hasta que en minuto 59, Christensen robó en el centro del campo, combinó con Gündogan, el alemán encontró a Lewandowski y el polaco, tras controlar, batió a Sergio Herrera con un ajustado disparo raso. Los jugadores de Osasuna reclamaron una falta sobre Arnaiz en el inicio de la jugada, pero ni el árbitro ni el VAR vieron nada y el gol subió al marcador.
En medio de esta revisión, Xavi Hernández aprovechó para dar entrada al terreno de juego Pedri y Joao Felix, lo que mejoró el juego de un Barcelona que con el once más pelotero posible dio un paso al frente y, ahora sí, parecía que se iba a hacer dueño del partido. Joao Felix tuvo la sentencia, pero se encontró con Sergio Herrera.
La clase de Joao Felix
La tuvo Budimir cuando la semifinal se encaminaba a los últimos 10 minutos del tiempo reglamentario, pero tiro, con rosca, lo atajó con muchísima seguridad Iñaki Peña. Y ya en los minutos finales, Osasuna, llena de fe, pudo empatar y no lo hizo, mientras que el Barcelona, tras un jugadón de Joao Felix, puso la sentencia con un gol de Lamine Yamal. Un gol que permitía a los de Xavi ganar por más de un gol, algo que no hacían desde septiembre.
Finalmente, la segunda semifinal de la Supercopa de España llegó a su fin sin sorpresas, sin despejar dudas, a pesar del resultado, para el Barcelona y con la sensación de que Osasuna pudo llevarse el gran premio. En definitiva, Arabia volverá a disfrutar de un Clásico y todos contentos, que para eso pagan muchos millones.