El Atlético recupera su ADN

El Atlético de Madrid ya tiene mejor cara. Los recién llegados ya van cogiendo la idea de Simeone y poco a poco se va pareciendo al Atleti de los últimos años, ese que ganó la Liga en 2014 y alcanzó dos finales de la Champions League. Ha llevado tiempo y trabajo llegar hasta aquí pero tras un largo y duro periodo de adaptación (con pitos hacia el Cholo inclusive) el equipo ha recuperado su ADN, sólido atrás y demoledor en ataque.

«Desde que empezó la temporada hemos tenido altibajos», decía Simeone tras la victoria ante el Villarreal. La falta de regularidad y las lesiones han marcado a los rojiblancos a lo largo de una temporada que se preveía de «transición» debido a los numerosos cambios que se han producido en la plantilla. Hasta ocho caras nuevas se han incorporado al equipo en el presente curso, que sumado a las salidas de pilares como Griezmann, Godín, Rodrigo o Lucas Hernández hacían del Atleti un equipo casi nuevo.

Los inicios siempre son complicados y a Simeone le ha costado más de media temporada lograr que los nuevos se acoplen al estilo. Al principio parecía que Lodi y Trippier se habían integrado a la perfección, pero luego empezaron a aparecer las carencias defensivas del brasileño y el técnico comenzó a sustituirle en cada partido. Pero en los últimos partidos se ha ganado su confianza y ha disputado los 90 minutos.

Granada como punto de inflexión

El partido ante el Granada en casa supuso un antes y un después del conjunto rojiblanco. Ese día el equipo empezó a cambiar la cara pese a que las lesiones le seguían lastrando. Llegó el día grande, el día en el que el Liverpool visitaba el Metropolitano y con la Liga prácticamente perdida la Champions se convertía en su gran esperanza, y respondieron a la perfección.

Los pupilos de Simeone saltaron al césped impulsados por la afición que les recibió por todo lo alto. Aquel fue el día en el que el Atlético recuperó su ADN, seguros atrás, presionando la salida de balón del Liverpool y saliendo al contragolpe con velocidad. Los reds tuvieron la posesión del balón pero no lograron tirar a puerta. El muro rojiblanco formado por Savic y Felipe no se resquebrajó en ningún momento y desbarataron cada acción del cuadro de Klopp.

Casualmente coincidía con la vuelta de Saúl al centro del campo. Tras varios partidos jugando tanto de extremo como de lateral, Simeone volvió a colocarle en su posición donde. Otra de los nombres propios a destacar, clave en el resurgir de este Atleti, es el de Koke, un futbolista fundamental en el juego del equipo. El capitán ha recuperado su mejor versión y eso les ha permitido dar un salto de calidad. Aunque sin duda la clave pasa por haber recuperado la fortaleza en defensa, la principal arma de este equipo.