Anisimova, finalista en Wimbledon tras superar la muerte de su padre y dejar el tenis por bullying
La tenista estadounidense se retiró del tenis por la presión mental y los comentarios despectivos en redes sociales
A su padre falleció repentinamente por un problema cardíaco cuando ella tenía 19 años

El tenis es el deporte más guillotina para los deportistas. Es una máquina devoradora de cuerpos y también mentes. La lista de tenistas que se han visto obligados a parar por estar superados es infinita. En ella estaba el nombre de Amanda Anisimova, que se retiró a mediados de 2023, cuando con sólo 22 años dijo basta. No podía más y decidió dar un paso al lado. «Estar en un torneo de tenis se ha vuelto algo insoportable», afirmó por aquel entonces.
Anisimova decidió colgar la raqueta debido a los comentarios contra su físico que recibía en redes sociales. Ello se sumó al repentino fallecimiento de su padre por un problema cardíaco cuando la tenista tenía 19 años. «Fue lo peor de mi vida», reconoció la tenista. El apoyo familiar y la terapia psicológica fueron sus herramientas para salir del pozo. Poco a poco fue encontrando de nuevo las ganas de empuñar una raqueta.
También gracias, en parte, a la pintura, su válvula de escape para liberar su mente hasta tal punto que este sábado afronta el mayor reto de su carrera. Está a un paso de levantar su primer Grand Slam, sólo Swiatek se opone entre ella y Wimbledon. Ahora el tenis le sonríe. Ha alcanzado la final tras sorprender con su potencia y agresividad a la poderosa Sabalenka, número uno del mundo. Y a sus 23 años, Anisimova es la 12 del ranking WTA.
«Esto te demuestra que es posible y creo que es un mensaje muy especial que estoy siendo capaz de mostrar. Cuando me tomé el descanso, mucha gente me dijo que no volvería a estar entre las mejores de nuevo porque me había ido durante mucho tiempo. Fue difícil digerirlo, porque quería volver, conseguir muchas cosas y ganar un Grand Slam algún día», lanzó Anisimova en rueda de prensa.
Este año ha ganado en Doha, fu finalista en Queen’s y cuando acabe la semana y se actualice el ranking se asomará por primera vez en su carrera al top 10 mundial. «Siempre supe dentro de mí que iba a volver al circuito, sin importar el tiempo que necesitase de descanso. Sentía que había muchas cosas que todavía quería lograr en este deporte. Una vez regresé, encontré una nueva pasión por el tenis. Es un pasión que no sentía antes, ni cuando era una adolescente. Cada victoria es mucho más especial ahora», detalla.
Su resiliencia mental y potencia con la raqueta le han llevado a su primera final de Grand Slam. Anisimova ha derribado todos los muros. «Siento que fue importante que me mostrase tan honesta y tan vulnerable sobre un tema que, quizás, todavía es algo estigmatizado en cierto modo. Conseguí que otra gente vea este tema con una perspectiva diferente. Puedes sufrir de salud mental. Es tan importante como la salud física, sobre todo cuando hablamos de un deporte y te dedicas a esto profesionalmente».