El método infalible para organizar el armario por colores y ahorrar tiempo al vestirte
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El desorden en el armario puede ser una fuente de d diario. Pasarse varios buscando qué ponerte o descubriendo que la blusa que querías usar está arrugada al fondo del armario no sólo consume energía, sino que también puede arruinar tu mañana. Una buena organización de la ropa no solo facilita la elección del look perfecto, sino que también aporta una sensación de orden y armonía, y aquí es donde entra en juego el truco para organizar el armario que se ha hecho viral en redes sociales. La mejor estrategia para lograr esto es dividir, categorizar y ordenar por colores, permitiendo que cada prenda tenga su sitio.
En menos de una hora y siguiendo una serie de pasos muy simples, transformarás tu armario en un espacio funcional y visualmente atractivo. De esta manera, al visualizar rápidamente las opciones disponibles, reduces el tiempo que pasas eligiendo qué ponerte. Asimismo, un armario bien organizado da sensación de armonía y evita el caos visual.
El mejor truco para organizar el armario
Antes de empezar a organizar, es fundamental hacer una selección de la ropa que realmente usas y te hace sentir bien. Para ello, divide tus prendas en tres categorías:
- Me encanta y me queda bien: son las prendas que usas con frecuencia, te favorecen y te hacen sentir seguro.
- Tal vez: aquellas prendas que no estás seguro de querer conservar. Quizás las usaste poco, pero dudas si deberías darles una última oportunidad.
- Adiós: prendas que no te quedan bien, están desgastadas o no utilizas desde hace más de un año.
Para hacer esta tarea más sencilla, usa tres cajas o bolsas grandes donde puedas ir colocando la ropa de cada cada categoría. Si una prenda no la has utilizado en el último año, es una señal de que debe salir de tu armario. Aquellas en la categoría de «tal vez», póntelas y decide si realmente las seguirás usando. Finalmente, las que te encantan serán la base de tu armario.
Una vez que hayas reducido tu ropa a lo esencial, el siguiente paso es clasificarla según su tipo. Separa camisetas, blusas, pantalones, faldas, chaquetas y vestidos en diferentes secciones. Este método ayuda a visualizar mejor lo que tienes y evita que diferentes estilos de ropa se mezclen, dificultando la búsqueda.
Si tienes perchas suficientes, intenta colgar las prendas que se arrugan con facilidad, como camisas o vestidos, y doblar aquellas que pueden mantenerse en pilas, como suéteres o camisetas.
Una de las estrategias más efectivas para ahorrar tiempo al vestirte es ordenar la ropa por colores. Además de dar un aspecto visualmente agradable, facilita la combinación de prendas y permite identificar rápidamente lo que buscas.
Para aplicar esta técnica, organiza cada categoría de ropa siguiendo un degradado de colores. Puedes empezar por los tonos más claros y avanzar hacia los oscuros: blanco, beige, amarillo, naranja, rojo, rosa, morado, azul, verde, marrón, gris y negro. Si prefieres, también puedes agrupar según paletas de colores más reducidas, como tonos neutros, fríos y cálidos.
Si tu armario es pequeño, es fundamental optimizar el espacio de almacenamiento. Usa organizadores de cajones para ropa interior y accesorios, ganchos adicionales para colgar bolsos o bufandas y cajas transparentes para guardar zapatos o prendas de otras temporadas. Las perchas delgadas de terciopelo ayudan a ahorrar espacio y evitan que la ropa se deslice.
Un armario ordenado requiere un mantenimiento periódico. Cada pocos meses, revisa tu ropa y repite el proceso de depuración para asegurarte de que solo conservas lo necesario.
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‘Doblado vertical’
Mantener el armario ordenado puede ser complicado, especialmente cuando las prendas están apiladas unas sobre otras. Sin embargo, una estrategia efectiva para optimizar el espacio y mejorar la visibilidad es la técnica de doblado vertical. Esta técnica, popularizada por Marie Kondo, permite visualizar todas las prendas de un vistazo y facilita el acceso sin necesidad de desordenar el resto.
Esta técnica ofrece múltiples beneficios. En primer lugar, permite una mayor organización, ya que al abrir el cajón se pueden ver todas las prendas sin necesidad de revolver. En segundo lugar, ayuda a ahorrar espacio, ya que las prendas ocupan menos volumen y se pueden almacenar de manera más eficiente. Asimismo, reduce las arrugas, ya que la ropa no queda aplastada bajo otras prendas. Por último, agiliza la rutina diaria, pues encontrar y sacar una prenda en concreto es mucho más sencillo y rápido.
Para aplicarla, lo primero es extender la prenda sobre una superficie plana. Luego, se dobla en tercios o cuartos, dependiendo del tamaño, hasta obtener un rectángulo compacto que pueda mantenerse en posición vertical. Finalmente, se coloca en el cajón o estante junto a las demás prendas.
En conclusión, el doblado vertical no sólo mejora la organización del espacio, sino que también facilita la elección diaria de la ropa. Por lo tanto, implementarlo en la rutina de organización del hogar puede traer grandes beneficios a largo plazo.