5 cosas extrañas que sólo ocurren en Japón
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Japón es un país donde los grandes contrastes se pueden encontrar en casi todas partes y eso lo vemos los occidentales como cosas extrañas.
Por ejemplo, en cualquier ciudad nipona es natural encontrarse con un templo milenario y en la esquina de la misma calle, con una tienda de robótica.
Los japoneses tienen una cultura muy particular, fruto de los casi trescientos años en los que se adoptó la postura de aislamiento absoluto frente al resto del mundo, llamado sakoku, establecida por el shogunato Tokugawa en el año 1600 y que se mantuvo hasta el año 1868.
Cosas extrañas que ocurren en Japón únicamente
La cultura japonesa destaca por estar basada en la ceremonia y el respeto, y es muy raro que en una discusión se llegue al insulto.
Lo que indican las normas de conducta es que, en caso de verse obligados por la situación, la magnitud del insulto será el equivalente al aumento de volumen y al tono con el que sea pronunciado, y no al insulto en sí mismo.
El equivalente de tonto o idiota serían los insultos más fuertes que podrás escuchar de un japonés.
Los japoneses son extremadamente adictos al trabajo y este aspecto de la sociedad nipona es bastante conocido internacionalmente.
Muchos japoneses suelen llegar media hora antes a sus lugares de trabajo. Es una costumbre extenuante ya que la mayoría de ellos suelen tener jornadas laborales de hasta 18 horas, casi sin descansos.
Existe una palabra específica para denominar a la muerte por exceso de trabajo: karoshi. En Japón, en la actualidad, mueren aproximadamente unas 10.000 personas con este diagnóstico.
Otra de las cosas extrañas que puedes encontrarte en Japón, es que las aceras tienen calefacción para que no se hielen y pueda transitarse por ellas.
Es un contraste casi increíble pues la gran mayoría de las casas no disponen de ningún tipo de servicio de calefacción central o similar.
Existen en Japón unos cubos ubicados en algunas esquinas que contienen paraguas.
Si empieza a llover, no tienes que preocuparte, porque puedes tomar cualquiera de los paraguas que estén en el primer cubo que encuentres y usarlo.
Cuando ya no lo necesites más, tendrás que volver a dejarlo en el cubo más cercano que veas.
Los japoneses sufren constantemente las catástrofes naturales, como terremotos e inundaciones, y a ninguno de ellos se les ocurre realizar algún tipo de saqueo en los comercios, o invadir la propiedad privada de otras personas.
Japón tiene los más bajos índices de criminalidad. En Tokio es absolutamente normal ver a niños de 6 años viajando solos en los medios de transporte públicos.
Para los occidentales, estos aspectos de la sociedad japonesa resultan cosas extrañas y al mismo tiempo muy atractivas culturalmente y no podemos evitar mirarlas con suma curiosidad.