6 métodos raros para predecir el sexo del bebé
Además de las pertinentes pruebas médicas, muchas son las parejas que recurren al uso de ciertos trucos “tradicionales” para poder conocer el sexo del bebé que viene en camino. En concreto, apuestan por hacer uso de la conocida tabla china e incluso del juego de la medalla. Pero no sólo eso, sino que también optan por hacer una predicción en base a la forma de la barriga de la mujer.
Estos últimos métodos nos pueden parecer extraños y fuera de toda lógica, pero para raros los que que ahora te vamos a dar a conocer a continuación. Se trata de técnicas de lo más peculiares, que no tienen ninguna base científica y que, de la misma manera, no ofrecen ningún tipo de fiabilidad. Esto significa que tienen las mismas probabilidades de acertar que de errar.
¿Quieres descubrirlas para así probar? Sigue leyendo:
1-La lectura de los pezones
Posiblemente te hayas quedado estupefacta con el título de este apartado, pero es que se considera que los pezones son los que nos pueden dar una pista de si el bebé que se está esperando es niño o niña. No tienes que pedirle a ningún futurólogo que te lea tus senos sino que simplemente debes observarlos y ver los habituales cambios que experimentan durante el periodo de gestación para así poder conseguir saber lo que deseas:
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Si los pezones se vuelven muy oscuros, este método predictivo tradicional dice que vas a tener un niño con toda seguridad.
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En el caso de que esa parte de tus senos se mantenga tal cual la tienes siempre, tu pequeño va a ser niña.
2-La alimentación durante el embarazo
Además de los pezones, se considera que también las embarazadas pueden prestar atención a uno de sus hábitos para saber a ciencia cierta si va a ser madre de un varón o, por el contrario, de una fémina. En concreto, este truco casero dice que hay que vigilar los alimentos a los que las mujeres les toman asco durante estos nueve meses para poder conseguir adivinar el sexo del bebé.
Exactamente determina que cuando la gestante rechaza de manera clara comer pollo, porque le da “fatiga”, va a tener un niño. ¿Por qué? Porque lo dice este método y punto, no hay explicación lógica de ningún tipo.
3-El aspecto de la madre
Este que ahora te presentamos es uno de los sistemas más tradicionales que se han venido utilizando a lo largo de décadas y décadas para saber el sexo del bebé que viene en camino. Consiste básicamente en mirar a la madre y comprobar su aspecto para adivinarlo:
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Establece que cuando las embarazadas durante esos nueve meses están más feas y sus caras se llenan de manchas es que tendrán una niña.
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Sin embargo, determina que cuando las futuras mamás están radiantes y más guapas que nunca, con una piel tersa y suave es que su pequeño es un varón.
4-Dime cómo andas y te diré…
¿Te están pareciendo absurdos estos métodos para predecir el sexo del bebé? Pues prepárate, aquí tienes otro tradicional que puede superar al resto en esa cualidad. Resulta que esta técnica establece que se puede adivinar si es niño o niña según cómo camina la embarazada. Así, determina que si al andar apoya más el cuerpo en el pie derecho será un varón y que si, sin embargo, pone más el peso en el izquierdo será una fémina.
5-La sal, como método predictivo
De la misma manera, no hay que olvidarse de este otro método que tiene una gran antigüedad, ya que aparece recogido en unos documentos de la Edad Media, que respondían al título de “Evangelios de las tareas femeninas” y que venían a recopilar creencias sobre cuáles eran las mejores posturas para concebir un varón o cómo descubrir el sexo del bebé del que se estaba embarazada.
Precisamente en esa obra se establece que para saber si será niño o niña se podía utilizar la sal. ¿Cómo? Había que esperar a que la gestante se durmiera y cuando lo estuviera se debía espolvorear por encima de la misma un poco de sal. Al día siguiente, nada más despertarse tenía que decir el primer nombre que se le viniera a la cabeza, así si era de hombre se sabía que su bebé sería varón y si era de mujer iba a ser una fémina.
6-Usar al padre como método de adivinación
Para cerrar el artículo de propuestas peculiares e incluso difíciles de creer, queremos presentarte este otro que también se recoge en la mencionada publicación medieval. En concreto, se trata de un método que establece que la mujer tendrá una niña si durante el periodo de gestación su marido ha aumentado de peso de manera considerable y si no es así, pues será mamá de un hijo.