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El pacto PP-Vox en Palma cierra el grifo a las entidades separatistas que financiaba el PSOE de Armengol

Palma PP Vox
El alcalde de Palma, Jaime Martínez y el líder de Vox en la capital balear, el concejal Fulgencio Coll.
Indalecio Ribelles
  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

El acuerdo programático firmado por PP y Vox este jueves 7 de septiembre en el Ayuntamiento de Palma cierra el grifo de las millonarias subvenciones municipales a los chiringuitos de género y a entidades independentistas dedicadas al fomento del catalán y que financiaba el pacto de izquierdas con la socialista Francina Armengol al frente.

El pacto recoge en el punto 18 el compromiso de «eliminar tanto las subvenciones nominativas como los programas de actuación de carácter ideológico». Las primeras son las aportaciones de dinero público concedidas habitualmente a dedo por el anterior gobierno presidido por el ex alcalde socialista José Hila a entidades muy determinadas.

Así sucedió sin ir más lejos el pasado mes de febrero, cuando el entonces primer edil repartió 632.000 euros a dedo a colectivos afines a cuatro meses de las elecciones en una decisión acordada, exclusivamente, por la Junta de Gobierno, y a la que no acompañaba informe alguno del interventor municipal, que debería certificar el correcto proceder de esta entrega nominativa de dinero público.

También se da por descontado el cierre del grifo de dinero público a colectivos vinculados al separatismo dedicados al fomento e imposición del catalán tras la apuesta del gobierno municipal por el bilingüismo, y a chiringuitos ideológicos relacionados con la diversidad sexual y de género, cuya supervivencia quedará en manos, como sucede con cualquier entidad, de las aportaciones de sus socios, y no, del bolsillo de todos los contribuyentes.

Y es que Vox en el caso del Ayuntamiento de Palma, y a diferencia de lo que ha sucedido en otros acuerdos con el PP, no tendrá presencia en el gobierno municipal, pero si la llave del control presupuestario. Por tanto, el partido liderado en la capital balear por el concejal Fulgencio Coll definirá las prioridades en el destino del dinero público, y las actuaciones a llevar a cabo a lo largo de los cuatro años de la presente legislatura.

La comisión bipartita de elaboración de los presupuestos que incluye el acuerdo programático -inédita en otros pactos entre ambos partidos-  formada por entre dos y tres representantes de cada formación, será la que definirá las prioridades en las cuentas municipales y en la gestión del dinero público.

Pacto PP-Vox en Palma

Además Vox, con el concejal Ignacio Estaban al frente, presidirá la subcomisión municipal de control presupuestario, y ambos partidos crearán una comisión de evaluación, control y seguimiento del pacto con el objetivo de supervisar el grado de cumplimiento del acuerdo y fijar los objetivos anuales estratégicos.

Y como recoge el punto sexto del acuerdo, del estricto cumplimiento de dicho pacto «se derivará el compromiso por parte de Vox de dar estabilidad al gobierno municipal» del PP (11 de 29 concejales del salón de plenos) «en todas aquellas actuaciones y propuestas que figuren en el mismo».

En las actuaciones del gobierno municipal que no tengan que ver con dicho acuerdo, Vox tendrá las manos libres porque como se apunta en el documento, «no estarán sujetas a este compromiso de estabilidad y su apoyo dependerá de que respondan o no al espíritu del pacto».

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