El juez autoriza la tala de los cinco árboles bellasombra del barrio de La Calatrava de Palma
Avala la tesis del alcalde Martínez y de los técnicos de que "hay peligro para la vida e integridad de las personas"
Rechaza la medida cautelar de paralizarla presentada por la Asociación Balear del Árbol
El juez autoriza la tala de los cinco árboles bellasombra del barrio de La Calatrava de Palma cuyo riesgo de caída es máximo, según los técnicos de infraestructuras del Ayuntamiento de la capital balear, y a la que se opone un colectivo vecinal, además de las formaciones de la oposición de izquierdas, encabezados por los socialistas.
El auto del Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Palma desestima la medida cautelar de paralización de su tala presentada por la Asociación Balear del Árbol (ABA).
Como recoge el fallo en una ponderación de intereses, «no prima en este caso el de la parte recurrente, ya que dado el estado de los árboles hay peligro para la vida e integridad de personas y animales y peligro de producirse daños en los bienes tanto públicos como privados».
Además precisa al respecto que el informe municipal del que se dispone «y no disponemos de otro, pone de manifiesto la debilidad de cinco árboles de entre 31 en la plaza de referencia y no existe un remedio de menor entidad. En consecuencia, es necesario desestimar la petición de la actora».
El juez basa su dictamen en que la medida cautelar puede denegarse «cuando pueda derivarse de la misma, una perturbación grave de los intereses generales o de terceros» que deberá de ponderarse «en forma circunstanciada».
El informe de los técnicos municipales era concluyente sobre el mal estado de estos ejemplares porque «su respuesta fisiológica y vegetativa a la podas, terciados y reducciones de copa que han sido necesarios a lo largo de estos años, hacen que la atenuación (reformación) como medida frente al riesgo, no sea técnicamente viable ya que actualmente son estructuras débiles y repetir las mismas actuaciones nos dará como resultado estructuras más débiles».
Por ello trasladaban al área de Infraestructuras, «la propuesta de tala e inmediata sustitución por riesgo de los ejemplares ubicados en la plaza de Llorens Villalonga».
Además los árboles, como puntualizan en su evaluación «están ubicados en el barrio de La Calatrava dentro del centro histórico con una frecuencia de paso y concentración de transeúntes (diana) elevado».
Tras conocer la decisión judicial el equipo de gobierno presidido por el alcalde del PP, Jaime Martínez, ha hecho público un comunicado destacando que la prioridad, en todo momento, ha sido garantizar la seguridad de las personas en el entorno, tomando la decisión de sustituirlos basándose, únicamente, en cuestiones técnicas.
Una vez presentado el recurso por parte de ABA se optó por vallar los ejemplares afectados para evitar incidentes y se presentaron los argumentos e informes que ahora el juzgado ha aceptado. Asimismo, resalta su intención de seguir colaborando con las diferentes asociaciones y entidades medioambientales para conseguir un municipio más sostenible y amable.
Hay que recordar que pese a conocer el riesgo de caída de estos ejemplares los independentistas de Més y sus socios del PSOE y Podemos en las filas de la oposición municipal, exigieron al gobierno en minoría del PP en la concentración vecinal que tuvo lugar a finales de enero, que los preservara porque «son emblemáticos» y «forman parte de la estética de este barrio» situado en el centro histórico de la capital balear.
La portavoz del partido, Neus Truyol, exigió » a la derecha que abandone su habitual fobia a los árboles y a la naturaleza en general, y que impulse todos los medios técnicos posibles para preservar estos ejemplares singulares. Su destrucción es un ataque al patrimonio de Palma».
La concejala de este partido, Kika Coll, fue más allá y reprochó al PP su falta de compromiso con la protección de la flora de Palma.
Para Coll, «eliminar árboles es una política muy típica del PP allá donde gobierna. Es lo mismo que está ocurriendo en Madrid con Ayuso y Almeida. Defendemos que es necesario continuar y aumentar las políticas de renaturalización del espacio público comenzadas con los gobiernos de izquierdas para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía. No todo el mundo tiene una vivienda preparada para resistir las ondas de calor. Tener sombra es un derecho básico de los vecinos de Palma», concluyó la concejala.