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Las 5 razas de gatos más raras del mundo

Razas gatos raras
Gato egipcio
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Los gatos son animales bien conocidos por todos, y se calcula que en el mundo existen 46 razas según datos de la Federación Internacional Felina. Pues bien, de todas las razas de gatos, hay algunas que son muy raras y, por lo tanto, llaman mucho la atención.

Gato Ashera

El gato Ashera no sólo es el gato más grande del mundo, sino también el más caro. Es curioso saber que nació en un laboratorio, mezclando la genética de un gato común con un leopardo asiático y un serval africano. En la vida adulta puede llegar a pesar 15 kilos y a medir 1,30 metros. A pesar de su gran tamaño, es un animal muy amable y obediente.

Gato Scottish Fold

Se trata de una de las razas de gatos más raras del mundo. Es fácil de reconocer por sus orejas, pequeñas y dobladas hacia delante. Es perfecto para una familia ya que es inteligente, atento, paciente, y, sobre todo, muy amable. Lo más importante para que viva sano y feliz es que su entorno esté limpio. ¡Le encantan los juegos de inteligencia!

Gato Munchkin

El por qué el gato Munchkin está en esta lista es porque sus patas son más cortas de lo normal, lo que le da al animal una apariencia un poco extraña, pero muy adorable. Su origen data de principios del siglo XX y es un gato de tamaño mediano/ grande y muy musculoso. En lo que respecta a su carácter, es tranquilo, juguetón y apegado.

Gato Egipcio

El gato Egipcio despierta admiración y odio a partes iguales. Su origen data de hace miles de años y su principal característica es que no tiene nada de pelo, aunque su cuerpo sí está cubierto de una pelusilla muy fina. Es una raza estupenda para tener como mascota ya que es mucho más obdiente y cariñosa que otras. En lo que respecta a sus cuidados, lo más importante es que no tenga frío para evitar que enferme.

Gato Elfo

Y, por último, el conocido como gato Elfo, cuyo aspecto es muy similar al de un perro. Se trata de una especie relativamente nueva, cuyo origen data del año 2007. No tiene pelo y su cara es extremadamente delgada y alargada. Sus orejas son puntiagudas y están dobladas hacia delante. Es un gato que se lleva muy bien con otros animales y seres humanos.

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