OKUPACIONES

Detenidos unos okupas que poco antes habían usurpado un edificio en reformas de Madrid

Los okupas han sido acusados de usurpación y robo con fuerza en el edificio de Madrid

Los okupas desalojados de un edificio en San Blas amenazan con volver: «Un desahucio, otra okupación»

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La UCE de Policía Municipal desalojando el edificio okupado en Madrid.
Ángel Moya

Un grupo de cuatro okupas ha sido desalojado de inmediato por la Policía Municipal tras usurpar un edificio en reformas en el distrito Centro de Madrid. Los cuatro okupas, de origen español, cubano y colombiano, fueron desalojados y detenidos pocas horas después del asalto. Se les acusa de los delitos de usurpación y robo con fuerza.

Los hechos tuvieron lugar a las 8:00 horas del pasado 28 de abril en un edificio en reformas en la calle Hortaleza del distrito Centro de Madrid. A esa hora, una patrulla de la Policía Municipal que vigilaba la zona fue requerida por un hombre a gritos.

Se trataba del encargado de la obra que manifestó a los agentes que al llegar al edificio se había encontrado la puerta forzada, atrancada y a varias personas en el interior que se negaban a marcharse. Los obreros, que iban a comenzar con la reforma esa misma mañana, informaron a los policías de que en el interior se hallaban sus herramientas valoradas en más de 10.000 euros.

Los okupas: «Nos quedamos a vivir»

Los policías intentaron razonar con los okupas pero la respuesta fue que no pensaban marcharse y que se quedaban a vivir en la planta baja del edificio. Los agentes, a través de una ventana, pudieron observar a los cuatro okupas instalándose en el edificio y optaron por llamar a sus compañeros de la UCE de Policía Municipal.

Amparados porque el edificio no reunía las condiciones de una vivienda y porque los okupas sólo llevaban unas horas dentro. Además, en el interior había enseres materiales de los obreros por un valor destacable. Tras confirmar todas estas circunstancias, los policías decidieron entrar en el edificio y desalojar de inmediato a los okupas.

Antes, los agentes se pusieron en contacto con el propietario del edificio que les dio su permiso para entrar en el inmueble, de igual forma que ya lo había hecho el encargado de la obra.

Los okupas, al ver a los policías decididos a entrar, optaron por claudicar y salir del edificio que pretendían okupar. Allí mismo fueron detenidos acusados de un delito de usurpación.

Los cuatro okupas, dos de origen español, otro cubano y un cuarto colombiano, también fueron acusado por la Policía Municipal de un delito de robo con fuerza ya que tras el desalojodel edificio los obreros manifestaron a los agentes que les faltaban algunas de las herramientas de gran valor que guardaban en el inmueble.

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