Una casa rural para trotamundos cosmopolitas
La Casa del Trotamundos en la parte zamorana de Tierra de Campos es una villa turística que se ha convertido en un referente para los viajeros que deciden visitar una de las zonas más emblemáticas de España. Un alojamiento rural con encanto de cuatro habitaciones ambientadas en diferentes partes del mundo. Están clasificadas según la decoración del país o el continente elegido: África, Oriente, USA y España. La España de la Castilla de los Reyes Católicos. El visitante puede sentirse cosmopolita en la Castilla más histórica.
El establecimiento hotelero está ubicado a 29 kilómetros de Benavente y 42 de Toro. Las instalaciones cuentan con una espaciosa terraza, bar, jardín, piscina y solarium -que todavía se puede aprovechar en el mes de septiembre-, wifi gratis, biblioteca, televisión con canales por cable o vía satélite, zona de comedor y chimenea para los fríos inviernos. Los clientes pueden optar por el desayuno continental o un copioso buffet.
El viajero, además de un hotel confortable, se encontrará con un paisaje envidiable, con llanuras que se pierden en el horizonte, antiguos palomares, las bodegas centenarias, las iglesias y sus torres habitadas por cigüeñas y esos atardeceres en los que el sol pinta el cielo como en ningún otro lugar.
La Casa del Trotamundos en el pueblo de Villamayor de Campos, en la histórica Tierra de Campos -la Tierra Gótica de la época visigótica-, en la parte de Zamora. La comarca se extiende además por Palencia, norte de Valladolid y León. Es un paisaje color dorado por las extensas plantaciones de trigo y cebada, aunque en las últimas décadas también destaca el verde de los viñedos de Toro y Ribera de Duero.
Villamayor de Campos, con apenas 300 habitantes, se encuentra en la frontera con Valladolid. Sus cimientos se remontan a la época en la que los romanos conquistaron la Península Ibérica. Además de la Iglesia de San Esteban, del siglo XIII, con su armadura (artesonado) mudéjar, destaca el castro celta o celtíbero Teso de las Bodegas, con una cincuentena de casas, construidas con adobe y ladrillo en las que los lugareños utilizan para almacenar el vino de sus propias cosechas.
En la zona también sobresalen los palomares, la mayoría del final del siglo XVIII, construcciones populares circulares, de adobe o piedra, que levantaban los hacendados en sus agrestes campos para dar cobijo a las aves, que después comercializaban, sobre todo las palomas.
La Casa del Trotamundos viene a llenar un importante hueco en la ya conocida como España vaciada que, entre todos tenemos la obligación de promocionar para devolver a sus habitantes el poderío de antaño. Y qué mejor revulsivo que el turismo, el ocio, la gastronomía, el vino y la cultura.
Villamayor de Campos pertenece a las trece villas castellanas que, el primero de noviembre de 1466, se reunieron para ofrecer el primer juramento a la Inmaculada Concepción, que se conoce en el mundo. Los ciudadanos de esas villas se juramentaron para defender el dogma de que la Virgen María fue preservada del pecado original. Lo hacían “a costa de su sangre y su vida”, como consta en los documentos históricos.
Los visitantes de La Casa del Trotamundos tienen la oportunidad de disfrutar en cortos desplazamientos en automóvil otras históricas villas como Medina de Rioseco con su Iglesia de Santa María de Mediavilla; Benavente con su iglesia románica de Santa María de Azogue, construida en el siglo XII; Urueña, con su ermita románica de Nuestra Señora de la Anunciada; o Toro, con su colegiata de Santa María la Mayor. Y otras ciudades de gran riqueza artística como Valladolid, Zamora, León y Palencia.
Desde La Casa del Trotamundos también se puede disfrutar de la naturaleza visitando las Lagunas de Villafáfila, el lago de Sanabria, la Sierra de la Culebra, los Arribes del Duero, el Canal de Castilla o el Camino de Santiago.
Por la zona donde está ubicado el establecimiento hotelero pasa la Vía de la Plata del Camino de Santiago con pueblos y rincones por los que transcurre el sendero de andaluces, extremeños y portugueses. El viajero podrá conocer la ruta siguiendo las huellas viales de los romanos. Esta ruta del Camino entra en la provincia de Zamora por El Cubo del Vino, hasta llegar a Villanueva de Campeón, donde se encuentran los restos del Convento Francisco de El Soto. Siguiendo las huellas de los peregrinos, se llega a Zamora para cruzar el Duero por el antiguo puente medieval. Para finalizar la Vía de la Plata zamorana, acabamos en Coomonte de la Vega, situada en la comarca natural de Benavente y los Valles.
¡Y cómo no¡ Los trotamundos pueden visitar los viñedos y las bodegas de la riquísima zona de Denominación de Origen de Toro, que no sólo se ha puesto al nivel de otras regiones vitivinícolas, sino que las ha superado con sus interesantes caldos. Aunque los visitantes tampoco pueden desdeñar los excelentes vinos de la Ribera del Duero por su proximidad a Valladolid.
Dirección: La Casa del Trotamundos. Ronda del Prado 10-12. Villamayor de Campos. Zamora. Telf. 697806521. [email protected]