Gripe

Es peligrosa y te puede afectar: estos son los síntomas de la variante K, la cepa mutada de gripe que invade España

En España despierta gran preocupación debido a su rápida propagación

La variante K pertenece a una versión mutada del H3N2

Los síntomas asociados a la variante K coinciden en gran medida con los del H3N2 clásico

Es peligrosa y te puede afectar: estos son los síntomas de la variante K, la cepa mutada de gripe que invade España

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Los cambios de estaciones generan un aumento de las enfermedades respiratorias. Una de las novedades sanitarias más preocupantes es la aparición de la variante K del virus de la gripe, derivada del subtipo H3N2. En España despierta gran preocupación debido a su rápida propagación y al incremento de afecciones moderadas a graves en ciertos grupos considerados más vulnerables. Si bien las gripes estacionales suelen presentar patrones predecibles, hay ciertas mutaciones del virus de la gripe que pueden modificar el comportamiento, la intensidad y la capacidad de transmisión.

A su vez, resulta fundamental identificar sus síntomas y conocer las medidas preventivas para el cuidado integral de la población general, en especial en épocas de alta circulación viral y en entornos donde los contagios se multiplican con mayor facilidad. La variante K pertenece a una versión mutada del H3N2, un subtipo que históricamente se asocia en temporadas de gripe más severas, especialmente entre los adultos mayores. Según explica Shalika Katugaha, directora del Sistema de Enfermedades Infecciosas e integrante del servicio de atención médica Baptist Health, el virus de la gripe evoluciona de forma constante, lo que da lugar a nuevas variantes cada temporada. «En el caso de la variante K, hay un aumento de casos con síntomas intensos y complicaciones más frecuentes en personas mayores y niños pequeños», advierte la experta. De acuerdo a miembros de los Hospitales CARE, la situación genera preocupación en España, donde la circulación del virus se intensifica en espacios como escuelas, transporte público, residencias de ancianos y lugares de trabajo.

¿Cuáles son los síntomas principales de la variante K (H3N2)?

Los síntomas asociados a la variante K coinciden en gran medida con los del H3N2 clásico, aunque especialistas de Hospitales CARE describen que algunos pacientes pueden experimentar una tos particularmente persistente que llega a durar hasta tres semanas.

«Entre los signos más frecuentes se encuentran la fiebre alta, que suele superar los 38 °C, la tos seca, dolor de garganta, dolores musculares generalizados, escalofríos y sudoración», mencionan. Asimismo, aparecen fatiga intensa, congestión nasal, cefaleas y debilidad marcada, síntomas que pueden extenderse más allá del cuadro febril inicial.

Si bien la mayoría de las personas logra recuperarse en un plazo aproximado de una semana, «la variante K está mostrando una tendencia a prolongar el malestar general, lo que contribuye a la percepción de una gripe más agresiva», afirman los profesionales.

Las posibles complicaciones de la variante K de la gripe

Si bien no todas las personas infectadas desarrollan complicaciones, la variante K puede agravar el estado de salud en personas vulnerables. «Entre las complicaciones más comunes se encuentran la neumonía bacteriana, infecciones del oído medio y sinusitis, además del empeoramiento de patologías crónicas», sostienen desde Hospitales CARE.

A su vez, aconsejan que los pacientes con insuficiencia cardíaca congestiva, asma, diabetes o trastornos metabólicos deben prestar especial atención ante cualquier síntoma persistente.

«También pueden verse comprometidas personas con enfermedades hepáticas, pulmonares, renales o trastornos hematológicos, ya que una infección viral de esta naturaleza puede descompensar condiciones preexistentes», detallan.

Por lo tanto, frente a la combinación entre infección viral y fragilidad médica, resulta esencial la vigilancia clínica en grupos de riesgo durante el desarrollo de picos epidémicos de la gripe.

¿Cuáles son los grupos con mayor riesgo?

Los expertos coinciden en que algunos grupos presentan mayor susceptibilidad a presentar una enfermedad grace. Según la información proporcionada por Hospitales CARE, destacan las mujeres embarazadas (especialmente durante el segundo y tercer trimestre), los niños menores de cinco años, los adultos mayores de 65 y las personas con enfermedades crónicas.

«Asimismo, quienes viven en entornos institucionalizados, como residencias geriátricas, también enfrentan un riesgo elevado debido a la facilidad con la que el virus se transmite por gotitas respiratorias», sostienen. También aconsejan evitar la concentración de personas en espacios cerrados durante los meses fríos porque incrementa la capacidad de propagación de la variante.

¿Cuál es el tratamiento recomendado por especialistas?

El trabajo médico para minimizar la variante K requiere una combinación de antivirales y medidas de cuidado domiciliario. En este sentido, recomiendan los antivirales como oseltamivir, zanamivir, peramivir o baloxavir marboxil, los cuales funcionan mejor cuando se administran dentro de las primeras 48 horas desde el inicio de los síntomas.

«Para aquellas afecciones no complicadas se recomiendan reposo adecuado, hidratación constante mediante agua o sopas y el uso responsable de analgésicos y antipiréticos de venta libre», asegura Shalika Katugaha.

Las medidas de prevención para reducir los contagios

Los expertos en sanidad confirman que la prevención continúa siendo la estrategia más eficaz para evitar complicaciones derivadas de la gripe. Las recomendaciones incluyen la vacunación anual, el lavado frecuente de manos, el uso de mascarillas en espacios concurridos, cubrirse al toser o estornudar y desinfectar superficies de uso común.

Además, insisten en mantener a los niños con síntomas en casa para evitar la transmisión comunitaria. A su vez, es clave mantener hábitos saludables como dormir bien, realizar actividad física y llevar una alimentación equilibrada para fortalecer el sistema inmunitario y mejorar la respuesta del organismo ante el virus.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias