Fallos más comunes cuando estás a dieta y no adelgazas

No te preocupes si te encuentras a régimen y no consigues bajar los kilos que deseabas. Antes de nada hay que decir que no hace falta seguir dietas demasiado estrictas, ya que en la mayoría de los casos será suficiente con cambia los hábitos alimenticios. En cualquier caso hoy te presentamos los fallos más comunes cuando estás a dieta y no adelgazas.

Cuando no se baja de peso es posible que estemos haciendo algo mal, de ahí que se preciso cambiar algo. Estate atento a nuestras recomendaciones porque posiblemente te sientas identificado.

Más calorías de las debidas

Hay que controlar el consumo de calorías, ya que en ocasiones pensamos que algunos alimentos son bajos en calorías pero lo más probable es que estemos cometiendo un exceso. Hay que vigilar el tipo de alimentos que nos llevamos a la boca. Como medida de prevención lo más adecuado es realizar una lista de la compra en la que no falten las frutas, hortalizas y verduras, que al fin y al cabo deben representar la base de nuestra dieta. Es importante que aprendamos a controlar los caprichos en forma de dulces y alcohol, que suelen ser ricos en calorías. Algunos expertos aconsejan ir apuntando en una libreta todo lo que comes a lo largo del día y calcular al final de la jornada las calorías.

Realizar ejercicio

Cuando hacemos dieta y aparcamos el ejercicio nos costará mucho más la pérdida de los kilos de más. En el caso de que reduzcas el número de calorías recortando únicamente en la alimentación y no gastando con la práctica del ejercicio físico, estaría provocando una situación de mayor ansiedad. Si apuestas por incluir el deporte en tu rutina diaria, verás cómo podrás permitirte unas cuantas calorías más en la dieta, además de recordar la gran cantidad de beneficios que tiene el ejercicio para ti. Lo más lógico es que te decantes por actividades que te motiven y que te permitan realizarlas prácticamente a diario, aunque también hay una serie de gestos rutinarios como ir andando a trabajar o subir las escaleras en lugar de coger el ascensor.

Excesos ocasionales

En muchas dietas suele haber un día libre en el que nos podemos saltar los planes del régimen. El problema surge cuando estos excesos se prolongan más de un día, que suele ocurrir con los fines de semana, fiestas o vacaciones. Hay que tener mucha fuerza de voluntad para no caer en esta trampa tan apetitosa. Con el día libre se descarga en cierta medida la sensación de estar atado a un régimen, pero se corre el riesgo de echar al traste el trabajo de toda la semana.

Metas accesibles

Para conseguir los objetivos que nos marquemos es preciso marcarse metas accesibles, que resulten fáciles de conseguir. Con perder a la semana unos 300 gramos sería más que suficiente, ya que al cabo del año bajaríamos quince kilos en la báscula. Se trata de una cifra accesible que tampoco nos exigirá un esfuerzo demasiado excesivo. Tampoco es cuestión de que te presiones mucho.