Así debes preparar tu sistema digestivo para Navidad

Las visitas a urgencias aumentan hasta un 7 % por intoxicaciones alimentarias y problemas digestivos debido al consumo excesivo de comida y bebida

digestivo Navidad
En Navidad se consume comida y bebida en exceso.

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Estamos en plena cuenta atrás. Las Navidades están a la vuelta de la esquina y con ellas llegan las comidas y cenas de empresas, la familia junta alrededor de la mesa, turrones, mazapanes y espirituosos. Los  excesos suelen tener un precio. Pero puedes preparar tu sistema digestivo para ‘amortiguar’ el impacto, documenta CompleteHealthClinic

Mireia Obón-Santacana, Profesora colaboradora del Máster Universitario en Alimentación Saludable y Sostenible de la Universitat Oberta de Cataluña, reconoce: «Las comidas y cenas son el eje de las reuniones familiares y sociales en las fiestas de diciembre. Pero también son excesivas, altas en calorías y en glucemia, lo que puede producir acidez, malestar estomacal, indigestiones y aumento de peso. Según la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), las visitas a urgencias aumentan durante las fiestas navideñas hasta un 7 %, por motivos como intoxicaciones alimentarias y problemas digestivos debido al consumo excesivo de comida y bebida, entre otros. Y, un estudio de la Asociación Americana del Corazón (AHA) indica que casi un 80 % de los estadounidenses abandona sus hábitos de alimentación saludables y un 45 % deja de practicar ejercicio en Navidad».

Estrategias

«Es importante disfrutar de las comidas navideñas sin remordimientos. Existen diversas estrategias para minimizar las digestiones pesadas, como evitar saltarse comidas y mantener un estilo de vida activo durante las festividades», recomienda .

Según la web NutritonallyKat, hay diversas razones por las que las fiestas generan más problemas estomacales que el resto del año:

      • A menudo comes más de lo habitual, lo que ejerce presión sobre el sistema digestivo.
      • Es posible que bebas mucho más cuando comes, ya sea champán en una fiesta o vino tinto el día de Navidad, esto diluye el ácido del estómago, lo que dificulta la digestión adecuada de los alimentos.
      • Consumir alimentos más ricos y cremosos de lo que estás acostumbrado puede provocar acidez estomacal o reflujo o empeorar los síntomas del Síndrome Inflamatorio Intestinal (SII)..
      • Pasar períodos más largos de lo habitual sentado y comiendo reduce el tiempo entre comidas y refrigerios, lo que significa que hay un flujo constante de alimentos y poco tiempo para que la digestión se realice sin problemas.

Y es que las celebraciones de las próximas fiestas empiezan mucho antes: comidas u cenas de empresa, con amigos…Es importante saber que beber alcohol y comer demasiado azúcar reduce la cantidad de bacterias saludables en el sistema digestivo. Por otro lado, también aumenta la cantidad de bacterias malas, que se alimentan de azúcar.

Los días previos a la Navidad son el momento perfecto para empezar a tomar probióticos de buena calidad, así  podrás desarrollar cierta protección para la Navidad. Aumentar las bacterias buenas en el estómago ayudará a digerir los alimentos y reducirá los síntomas de la hinchazón.

Otras medidas

 Según la página menusgastro.com otras ‘tácticas’ eficaces son:

El primer paso para mantener un intestino sano durante las fiestas es el control de las porciones. Es fácil dejarse tentar por la variedad de platos, pero la moderación es la clave.

      • Usa platos más pequeños: esto puede hacer que las porciones parezcan psicológicamente más grandes y lo ayude a comer menos. 
      • Sírvete usted mismo: puede controlar mejor el tamaño de las porciones si se sirve usted mismo.
      • Come lentamente: el cerebro tarda unos 20 minutos en registrar la sensación de saciedad. Alimentos ricos en fibra: incluya muchas verduras, frutas y cereales integrales. La fibra ayuda a la digestión y ayuda a mantener estables los niveles de azúcar en sangre, como explica la Clínica Mayo.
      • Proteínas magras: opta por pavo o pollo en lugar de carnes procesadas. Las proteínas magras son más fáciles de digerir y tienen menos probabilidades de causar molestias.
      • Limita los alimentos ricos en grasas: pueden ralentizar la digestión y provocar acidez o indigestión. Disfrútalos con moderación.
      • Controla tu ritmo durante las comidas
      • La forma en que se come es tan importante como lo que se come. Controla yu ritmo es fundamental para evitar abrumar su sistema digestivo.

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