5 mitos sobre el tabaco
Con el paso de los años, se ha identificado el tabaquismo como uno de los grandes factores de riesgo. Lee estos mitos sobre el tabaco.
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El tabaco es un producto agrícola obtenido a partir de las hojas de una planta denominada Nicotiana tabacum. Aunque tenga otros usos en la industria actual, su principal aplicación es como producto en la fabricación de cigarros y cigarrillos. Durante muchos años, el consumo del tabaco ha sido promocionado e incluso se ha llegado a reconocerle ciertas funciones terapéuticas. Aquí hablaremos un poco más sobre 5 mitos sobre el tabaco y el tabaquismo. ¡Sigue leyendo y aprende más sobre tu salud!
5 mitos sobre el tabaco que necesitas dejar de creer
Antes de empezar, queremos aclarar que las informaciones compartidas a continuación, con el objetivo de derrumbar los mitos sobre el tabaco más comunes, están basadas en datos proporcionados por la Organización Mundial de la Salud, la Asociación Española contra el Cáncer y la Asociación Americana contra el Cáncer. Al compartirlas, esperamos ofrecerte un poco más de conocimiento para cuidar mejor de tu salud y bienestar. Allá vamos:
Muchas personas fuman y están saludables
Las cifras globales desmienten este mito sobre el tabaco. Según informes de la OMS, más de la mitad de las personas que fuman mueren por causas relacionadas directamente con el consumo de estos productos. A cada año, alrededor de 8.2 millones de fallecimientos se producen en consecuencia directa (7 millones) o indirecta (1.2 millones) del consumo del tabaco. En la actualidad, se trata de la principal causa de muerte evitable en los países desarrollados.
En la mayoría de los casos, los efectos nocivos del tabaco en la salud se desarrollan de forma progresiva, a medio o largo plazo. Por ello, aún es común que algunas personas “defiendan” su propio tabaquismo al afirmar que no perciben repercusiones dañinas en su calidad de vida.
Sin embargo, se reconoce al tabaquismo como un factor de riesgo clave no solo para el desarrollo del cáncer de pulmón y otras complicaciones del sistema respiratorio, sino también de enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares (ACV). Además, fumar tiene un impacto negativo en la salud reproductiva de hombres y mujeres, pudiendo resultar en disfunción eréctil y problemas de fertilidad.
Hay formas menos dañinas de consumir el tabaco
Muchas personas asocian los efectos nocivos del tabaquismo únicamente con el hábito de fumar cigarrillos industrializados. Sin embargo, este es otro de los falsos mitos sobre el tabaco, ya que su consumo resulta perjudicial a la salud en todas sus modalidades.
Aunque los cigarrillos sean la forma más extendida en todo el mundo, otros derivados, como el narguile, los cigarros y puritos, y los productos de tabaco sin humo, como las gomas de mascar y el rapé (tabaco en polvo), son igualmente dañinos a nuestro organismo. Sobre estos últimos, hoy se sabe que pueden llegar a ser extremadamente adictivos, además de contener toxinas cancerígenas que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer en la garganta, boca, esófago y cuello, al igual que problemas dentales.
Fumar menos que cinco cigarrillos por día no se considera tabaquismo
Todo consumo de tabaco sostenido en el tiempo se considera tabaquismo, independiente de la modalidad y la cantidad elegida por la persona. Aún es común escuchar los términos “fumadores crónicos o empedernidos”, en referencia a quienes consumen más de 30 cigarrillos por día, y fumadores ligeros, aquellos que fuman menos de 5 cigarrillos diariamente.
Durante mucho tiempo, se ha propagado un falso mito de que estos últimos podrían no tendrían su salud afectada, debido a que consumían una cantidad reducida de tabaco. Sin embargo, no es cierto que fumar menos de cinco cigarrillos por día no te hará daño o no te deja expuesto a los riegos del tabaquismo.
De hecho, un reciente estudio de la Universidad de Columbia apunta a que este hábito de fumar reduce significativamente la capacidad pulmonar, y puede ocasionar daño en los pulmones a largo plazo.
Solo los fumadores son afectados por el tabaco
Este es uno de los mitos sobre el tabaco que dificulta el entendimiento del tabaquismo como una cuestión de salud pública. Aún existe una falsa creencia de que únicamente los fumadores, aquellos que eligen voluntariamente consumir el tabaco, se ven afectados por este hábito dañino. Pero ello es incorrecto.
El término “fumador pasivo” hace referencia, precisamente, a todas las personas que son afectadas por el humo del tabaco sin consumirlo. Este humo contiene más de 4.000 productos químicos dañinos, de los cuales al menos 250 resultan nocivos a la salud, y 50 son cancerígenos. Y como mencionamos anteriormente, alrededor de 1.2 millones de personas fallecen a cada año debido al “tabaquismo indirecto”.
Por otro lado, es importante tener en mente que la exposición al humo ambiental del tabaco no hace daño solo a los seres humanos. También nuestras macotas sufren las consecuencias, pudiendo desarrollar trastornos respiratorios, alergias y diferentes tipos de cáncer al convivir con un fumador.
Las advertencias en los productos de tabaco no funcionan
Pues, esto también es falso. La prohibición de la publicidad en diversos países, sumada a las advertencias graficas o visuales en los productos del tabaco, viene surtiendo un efecto positivo. Además de alertar sobre los riesgos del tabaquismo para el fumador y todos a su alrededor, también fomentan el respeto a los ambientes libres de humo.
Las iniciativas de aumentar los impuestos sobre el tabaco, a pesar de polémicas, también se muestran eficaces. Se estima que un aumento de 10% en el precio del tabaco, conlleva a una reducción de 4% en el consumo en países de ingresos altos, y de 5% en los países con ingresos bajos o medios.
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