Si esto no es un delito de odio que venga la Fiscalía de Sánchez y lo vea

Según el Ayuntamiento socialista de Castillo de Aro, Playa de Aro y Sagaró, en Gerona, los comportamientos machistas se vinculan con los hombres que hablan español, porque los cataloparlantes responden a actitudes correctas. Por eso el consistorio ha puesto en marcha una campaña de concienciación contra la violencia de género en la que se reproducen mensajes machistas en español y los mensajes feministas positivos son en catalán. Todo es tan burdo que se vuelve grotesco. Los mensajes en español se subrayan en rojo para advertir de que la frase es machista, mientras que los escritos en catalán reciben el visto bueno con un subrayado verde. Por ejemplo: «Tú con tantas curvas y yo sin frenos», redactado en español, recibe una valoración negativa y «Les floretes son assetjament: del meu cos no s’opina» («Los piropos son acoso, de mi cuerpo no se opina») es puesto como ejemplo a seguir. Concluyendo: la estupidez y el sectarismo se dan la mano para alumbrar una campaña que es un canto a la estulticia. O sea, se dibuja un perfil de acosadores sexuales que hablan en español y deja el catalán para aquellos mensajes que, a su juicio, tratan a las mujeres de forma positiva.
Estamos ante lo más perverso de la ideología de genero: identificar a quienes hablan español con comportamientos delictivos y a los catalanoparlantes como referentes de los valores positivos en materia de igualdad. Esto es xenofobia pura promovida por un ayuntamiento socialista de Cataluña, que en su afán de seguir la estela de los golpistas ya no sabe cómo hacer el ridículo. Si esto no es un delito de odio que venga la Fiscalía de Pedro Sánchez y lo vea, porque más claro no puede ser. Ahora bien, más allá de que el Ministerio Público se ponga de canto, lo que está claro es que el socialismo destila sectarismo por los cuatro costados.