Carpe diem

Matar moscas con el rabo

Matar moscas con el rabo
Matar moscas con el rabo

Algunos partidos se especializan en buscar un problema para cada solución, caso de Podemos y su reciente proyecto sobre la menstruación, una cuestión que Sanidad tiene ya resuelta. Otros, como Més, se dedican a plantear cosas que no sirven para nada o sea como quien dice, para entretenerse, a matar moscas con el rabo, como el diablo cuando no tiene nada que hacer.

Y tal es el caso que ahora nos ocupa por el que la presidenta Armengol, a instancias de sus socios independentistas de Més per Mallorca, exige al presidente Sánchez que reforme «de manera urgente» la ley de secretos oficiales, para garantizar que se desclasifiquen los archivos del Golpe de Estado del 23-F, el GAL, el abandono del Sáhara y la marcha verde.

Y esto ha ocurrido mediante la aprobación de una proposición no de ley aprobada en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament balear con los votos a favor del Govern, sus socios independentistas y Podemos. Y para variar con la oposición del PP, Vox y Ciudadanos. La iniciativa de los socialistas baleares se suma ahora a lo que le piden al gobierno los independentistas vascos y catalanes, a los que raudos y veloces acuden en su apoyo los independentistas locales.

La argumentación de Més para llevar a cabo tal proposición se justifica en que «es un deber democrático conocer mejor el terrorismo de estado del GAL», aunque para disfrazar la iniciativa que es la que interesa realmente a los independentistas vascos, viene camuflada en por querer saber más sobre el abandono del Sáhara Occidental o el 23 F, que es algo que les importa una higa.

Pues hete aquí una breve descripción de lo que fue el GAL, o sea los Grupos Antiterroristas de Liberación. Fueron agrupaciones parapoliciales que practicaron terrorismo de Estado o «guerra sucia» contra la organización terrorista Euskadi Ta Askatasuna (ETA) y su entorno entre 1983 y 1987. Durante el proceso judicial contra esta organización fue probado que estaba financiada por altos funcionarios del Ministerio del Interior y por ello acabaron en la cárcel Barrioneuvo y Vera.

La paradoja de la aprobación por parte de los socialistas baleares de esta proposición no de ley es que fue precisamente el socialismo, el PSOE de Felipe González, quien creó el GAL. Hasta tal punto llega pues la sumisión de Francina al independentismo. Claro está que Sánchez, su espejo en estas cuestiones, ya ha renegado de un PSOE de la primera hora que, aunque sin duda cometió errores, le puede servir de ejemplo a la débil, caótica y desnortada situación actual. Y que, dicho sea con todo fundamento, no puede ser peor. ¿O sí? En todo caso de este país, al ritmo que vamos, no van a quedar ni las raspas.

Lo último en Opinión

Últimas noticias